Si cada ciudad tiene su sabor único, sin duda Changsha, capital de la provincia de Hunan, tiene el "aromático"sabor del tofu apestoso.
El tofu apestoso de Changsha. (Foto: Yuan Meng/ Diario del Pueblo Digital)
Después de tamizar, bombear, refinar, filtrar, hervir, fermentar y realizar otros procesos, la soja se convierte en embriones de un tofu llamado apestoso porque huele mal y hace que muchas personas frunzan el ceño y se tapen la nariz.
Sin embargo, para un maestro experimentado del tofu apestoso, estos cubos de tofu que a primera vista parecen negros tienen sus propios méritos.
Deng Lili está en la calle peatonal Huangxing, en el centro de Changsha. (Foto: Yuan Meng/ Diario del Pueblo Digital)
La joven Deng Lili es una chef especializada en freír tofu apestoso. Ella prefiere ponchar el tofu apestoso recién frito, y llenarlo con caldo y salsa de pimienta y finalmente espolvorear con cilantro y rábano cortado en cubitos. El tofu apestoso es crujiente por fuera y suave por dentro, con un sabor espectacular después del primer bocado.
Turistas toman fotos frente a la tienda de Deng Lili. (Foto: Yuan Meng/ Diario del Pueblo Digital)
La tienda de tofu apestoso donde trabaja Deng Lili se encuentra en la calle peatonal Huangxing, una de las zonas más concurridas de Changsha. Según ella, vendió 10.000 tazones de tofu apestoso al día durante el Festival de la Primavera de este año, y hasta los clientes hacían fila en el lado opuesto de la calle.
El tofu apestoso ha acompañado a la gente de Changsha durante incontables años. Con su espectacular color, sabor y aroma, esta especialidad gastronómica china ha quedado en la memoria de todos los residentes y visitantes de Changsha, convirtiéndose en el símbolo más vívido de la vida cotidiana de esta gran ciudad.
(Web editor: 周雨, Zhao Jian)
