El cráter de Rano Raraku se encuentra hacia al este de la Isla de Pascua (Chile), cerca de la costa sur. Este volcán fue clave para la tribu polinesia de los rapa nui, ya que fue en sus laderas, tanto interiores como exteriores, se tallaban los moais, sus enigmáticos monolitos (se calcula que unos 400 permanecen en la cantera). Las aguas de su laguna interior se han secado lo que ha facilitado el descubrimiento de una nueva estatua moai, ya que el terreno era inaccesible.
De acuerdo con un comunicado emitido por el parque arqueológico, un grupo de profesionales y estudiantes voluntarios estaban realizando estudios geológicos tras el incendio que registró la isla en 2022, y que afectó especialmente a Rano Raraku.
Allí fue hallado un moai de toba volcánica de una pieza, que mide alrededor de 160 centímetros y que, a primera vista, cuenta con un regular estado de conservación. En estos momentos, se están realizando las primeras investigaciones en el monolito con el fin de conocer su conservación y "buscar los recursos que permitan el estudio que determine la datación, la época a la que corresponde y cómo llegó hasta el lugar donde fue encontrado, ya que es una pieza que no se encuentra en los registros de levantamiento ni inventarios arqueológicos de la cantera", dijo Terry Hunt, profesor de arqueología en la Universidad de Arizona.
Hay aproximadamente 1.000 moai en la Isla de Pascua. Estas figuras humanas monolíticas fueron talladas en roca volcánica hace unos 500 años por los rapa nui. Se cree que encarnan espíritus ancestrales y se colocaron en un anillo alrededor de la isla, mirando hacia adentro.
(Web editor: 周雨, Zhao Jian)
