Autoridades israelíes arrestaron a varios judíos sospechosos del atroz homicidio de un adolescente palestino la semana pasada en Jerusalén Oriental, dijeron la policía y la Agencia de Seguridad Israelí Shin Bet.
Las autoridades israelíes creen que los sospechosos mataron la semana pasada a Mohammad Abu Khedir, de 15 años de edad y originario de Shuafat, en Jerusalén Oriental, por razones nacionalistas, en respuesta al secuestro y asesinato de tres adolescentes israelíes cuyos cuerpos fueron encontrados varios días después del asesinato.
De acuerdo con Shin Bet, los sospechosos están siendo interrogados en estos momentos en las instalaciones de la agencia.
Varios medios de comunicación israelíes informaron que seis judíos extremistas fueron arrestados. Los sospechosos están asociados a un infame grupo de aficionados del Club de Fútbol Beitar Jerusalén, conocido como "La Familia", célebre por su racismo contra los musulmanes y árabes y por sus visiones extremistas.
Abu Khedir fue asesinado y su cuerpo fue encontrado en una zona arbolada el 2 de julio. El crimen fue cometido en medio de una oleada de extremistas de derecha judíos que defienden la violencia contra los árabes, luego del descubrimiento de los cuerpos de tres jóvenes israelíes el lunes por la noche, quienes se cree que fueron asesinados por militantes palestinos.
De acuerdo con el informe de la autopsia presentado durante el fin de semana, se encontraron restos de humo en los pulmones de Abu Khedir, lo cual sugiere que fue quemado vivo por sus asesinos. Más del 90 por ciento de su cuerpo presenta quemaduras.
Los enfrentamientos masivos entre cientos de palestinos y fuerzas de seguridad israelíes continuaron en Jerusalén Oriental y en el norte de Israel luego del asesinato del joven. Al menos 22 arabe-israelíes fueron arrestados mientras los enfrentamientos continuaban el sábado.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo en respuesta a las detenciones que Israel "no diferencia entre el terrorismo palestino y el terrorismo judío", según una declaración de su oficina.
El ministro de Asuntos Públicos de Israel, Yitzhak Aharonovich, quien está a cargo de la policía israelí, describió al homicidio como "un terrible e inaceptable acto que cualquier persona cuerda debe condenar en términos enérgicos".
Suha, la madre de la víctima, dijo al diario Ha'aretz que acoge la noticia del arresto, pero tiene poca fe en el sistema judicial israelí. "No tengo nada de paz en mi corazón. Incluso si capturaron a quienes dicen que mataron a mi hijo, sólo responderán a sus preguntas y los dejarán libres. ¿Cuál es el caso?".