El mayor sindicato de Sudáfrica prometió hoy intensificar una perniciosa huelga en el sector del metal y la ingeniería luego de que las compañías retiraron su oferta salarial.
La forma deshonesta y carente de principios en la que las compañías han estado actuando causó la prolongación de la huelga, señaló la Unión Nacional de Trabajadores del Metal de Sudáfrica (NUMSA, por sus siglas en inglés).
El sindicato responsabilizó a la Federación de Industrias de Ingeniería y del Acero de Sudáfrica (SEIFSA, por sus siglas en inglés) que retiró el martes su oferta salarial.
SEIFSA "debe asumir directamente la culpa", indicó Castro Ngobese, vocero nacional del NUMSA, en Johannesburgo.
"Rehusamos ser chantajeados por otros voceros autoproclamados de los jefes, en el sentido de que nuestra legítima huelga desplomará la economía y llevará al país a la recesión", dijo Ngobese.
Kaizer Nyatsumba, director de SEIFSA, dijo que la oferta final hecha la semana pasada, la cual tenía el propósito de terminar la huelga y ver que los empleados regresaran a labores esta semana, no cumplió su objetivo y desde entonces fue retirada.
La oferta rechazada por NUMSA consistía en un aumento salarial del 10 por ciento en 2014, 9,5 por ciento en 2015 y de nueve por ciento en 2016.
La oferta fue planteada con la condición de que condujera a una rápida solución que pusiera fin a la huelga ahora en curso, la cual ha estado acompañada de actos de violencia en algunas partes de Sudáfrica.
La medida irritó a NUMSA que amenazó con llevar a cabo nuevas acciones, incluyendo alentar a más trabajadores a unirse a la huelga, realizar marchas de protesta en ciertas ciudades y localidades y hacer piquetes de solidaridad durante el almuerzo y manifestaciones en sectores vinculados o afectados por la huelga de metales e ingeniería.
Los integrantes del NUMSA están unidos y resolvieron que nada los dividirá ni afectará su huelga por un salario digno y mejores beneficios, dijo Ngobese.
Más de 220.000 integrantes del NUMSA dejaron de trabajar el 1 de julio en una nueva ronda de disturbios laborales que se espera que asesten un gran golpe a la economía sudafricana que todavía se tambalea por una huelga de cinco meses en la industria de platino que terminó el 25 de junio.