El gobierno brasileño montó un esquema de vigilancia ante la posible llegada al país del virus del ébola, luego de la epidemia regsitrada en varios países de Africa.
"No tenemos ningún caso sospechoso, pero todos los tripulantes y pasajeros que llegan (de vuelos procedentes de área de riesgo) son sometidos a rigurosa evaluación y, si identificamos a alguien con los síntomas, de inmediato lo aislaremos y lo someteremos a exámenes", anunció hoy el ministro brasileño de Salud, Arthur Chioro.
Chioro informó que el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica está atento a las recomendaciones que son hechas en los boletines diarios de la Organización Mundial de Salud (OMS), con la finalidad de adoptar las medidas preventivas que sean necesarias.
El ministro de Sanidad brasileño explicó que el gobierno aumentó el rigor de los criterios para el diagnóstico del ébola, en colaboración con los principales hospitales del país y con los gestores locales de salud debido a la "necesidad de estar atentos" para prevenir un brote en el país.
Los últimos informes de la OMS muestran que al menos 887 personas han muerto en Liberia, Sierra Leona, Guinea y Nigeria, todos situados en la parte oeste del contiente africano, a causa del brote del virus ébola que ha dejado hasta el momento unos 1.300 infectados.