El gobierno de Guatemala declaró hoy el estado de calamidad pública para 17 de los 22 departamentos del país, debido a la extensa sequía que ha puesto en riesgo alimentario a unas 200 mil familias campesinas e indígenas, informó hoy el presidente, Otto Pérez Molina.
"Hemos firmado en la Junta de Gabinete de este lunes el Decreto Gubernativo que declara Estado de Calamidad Pública en 17 departamentos por las consecuencias provocadas en la agricultura por la sequía prolongada", anotó el mandatario guatemalteco en su cuenta de Twitter.
El acuerdo, que será publicado el martes en el diario oficial y necesita ser refrendado por el Congreso, permite al gobierno la implementación inmediata de planes de asistencia o ayuda humanitaria a unas 200 mil familias, que tienen cultivo de subsistencia, pero la falta de lluvia desde hace 8 semanas echó a perder la cosecha.
En conferencia de prensa, el Ministro de Agricultura, Elmer López, dijo que el gobierno necesita de unos 60 millones de dólares en los próximos cinco meses para atender la emergencia alimentaria.
La temporada lluviosa, que va de mayo a octubre de cada año en Guatemala, ha tenido una fuerte pausa desde principios de julio, con episodios de calor abrumador, derivado del llamado "fenómeno del niño".
El plan comenzará a aplicarse en octubre, porque la mayoría de las familias tienen en la actualidad reservas de la cosecha anterior, pero la segunda cosecha es la más impactada y es cuando comenzará la ayuda asistencialista.
Las familias que posean niños de menos de 5 años recibirán dotaciones de maíz, frijol y harina enriquecida. Los alimentos son parte de las reservas del Gobierno y del Programa Mundial de Alimentos (PMA), que juntas suman unas 4 mil toneladas.