Las autoridades de República Dominicana concluyeron hoy que fue un "acto terrorista" el incendio provocado hace unos días en el metro de Santo Domingo, y que existe la posibilidad de que haya otros implicados en el caso.
"No vamos a permitir hechos de esta naturaleza", dijo el procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, durante una rueda de prensa en la que anunció que el ministerio público pedirá que el acusado, Frank Holguín Medina, de 21 años, sea condenado a 40 años de prisión por el crimen tipificado como terrorismo.
Según la policía dominicana, Holguín se entregó el martes a las autoridades y admitió que fue él quien la mañana del lunes prendió fuego a una mochila que llevaba consigo, y que lanzó en un vagón en movimiento del metro de Santo Domingo que iba en dirección este-oeste.
El ataque, que causó gran conmoción entre los habitantes de la capital dominicana, dejó 19 heridos, siete por quemaduras, y movilizó a varias unidades del cuerpo de bomberos, de la policía y del sistema de emergencias 911.
"El Estado dominicano no permitirá que hechos de esta naturaleza queden sin sanción, por lo que estamos profundizando las investigaciones hasta llegar a la verdad", insistió el procurador general.
En la rueda de prensa realizada hoy, el portavoz de la Policía Nacional, coronel Jacobo Mateo Moquete, dijo que las evidencias indican que existe la posibilidad de que una o varias personas más hayan actuado con Holguín para cometer el ataque.
Moquete agregó que, según certificó el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), el acusado usó gasolina mezclada con piedra molida y otras sustancias para llevar a cabo el atentado.
En la conferencia de prensa también participaron el ministro de Defensa, teniente general Máximo Muñoz Delgado; el jefe de la policía, mayor general Castro Castillo, y el director del Cuerpo Especializado de Seguridad del Metro, general Bonarges Batista, entre otros funcionarios.
La Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret), organismo encargado del manejo del metro, distribuyó la misma noche del ataque un video y fotografías de un joven que aparece sin camisa subiendo por las escaleras de una estación e interrogado por un agente de seguridad antes de perderse de vista.
Según las autoridades, al momento del atentado el tren se encontraba en un 75 por ciento de su capacidad máxima, es decir entre 450 a 500 pasajeros.
Es la primera vez que un incidente de esta naturaleza ocurre en el metro de Santo Domingo, uno de los principales medios de transporte público de la capital dominicana.
La primera de seis líneas funciona desde el 2009 en sentido norte-sur, con 16 estaciones y 14,5 kilómetros de longitud.
La segunda línea, abierta en abril del año pasado y donde ocurrió el incendio, se extiende de este a oeste a lo largo de 22 kilómetros y medio de longitud y 24 estaciones soterradas.
El metro transporta cada día a más de 260.000 personas.