La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, dijo hoy que sólo anunciará al nuevo ministro de Hacienda a su regreso de Australia, donde participará los días 15 y 16 de noviembre de una reunión de mandatarios del G-20, grupo de las 20 mayores economías desarrolladas y en desarrollo.
En diálogo con la prensa al recibir dirigentes políticos aliados en el Palacio del Planalto, Rousseff apuntó que definirá al reemplazante del ministro Guido Mantega a su regreso de la Cumbre del G-20, porque antes "no alcanza el tiempo".
La formación del nuevo gabinete para su segundo mandato será hecha "por partes", informó la mandataria, reelecta en octubre para un nuevo mandato de cuatro años que se iniciará el 1 de enero de 2015.
Mantega había anunciado en septiembre, en medio de la campaña electoral, que dejaría el cargo tras ocho años al frente del equipo económico, que asumiera en el primer mandato del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010).
Existe una gran expectativa sobre el nombre del nuevo titular de Hacienda, que debe indicar el rumbo económico en el segundo mandato de la presidenta.
Entre los nombres más mencionados está el del ex presidente del Banco Central, Henrique Meirelles, un técnico alineado con la "ortodoxia" liberal, quien sería el favorito para el cargo del ex presidente Lula da Silva, padrino político de Rousseff.
En la ceremonia de este miércoles en el Palacio de Planalto, la líder brasileña recibió apoyo del Partido Social Democrático (PSD, centro derecha), que lidera el ex alcalde de Sao Paulo Gilberto Kassab, quien podría convertirse en ministro.
El PSD tendrá la cuarta mayor bancada en la Cámara de Diputados a partir de la nueva legislatura que asumirá en enero próximo.