BEIJING, 7 nov (Xinhua) -- Perú necesita una agenda a largo plazo para hacer avanzar la implementación y la ejecución de todos los acuerdos que tiene con China, para que no se quede en papel sino llevarlos a la práctica, manifestó Juan Carlos Capuñay, embajador peruano en China.
Durante una entrevista con Xinhua, Capuñay destacó las perspectivas optimistas de la cooperación pragmática entre ambos países y la creciente importancia que tiene China para el desarrollo tanto del Perú como de toda Latinoamérica.
La conclusión del diplomático proviene, en parte, de la relación comercial y económica bilateral cada vez más sólida y de los avances en la cooperación integral que se están produciendo en la relación sino-latinoamericana durante los últimos años.
En 2012, el gobierno chino anunció un paquete de medidas para fomentar la cooperación general y la inversión en Latinoamérica, como el fondo de infraestructura de 10.000 millones de dólares o el fondo de cooperación agrícola de 50 millones de dólares, propuestas ambas que en julio de 2014 iniciaron una fase de acciones con ocasión de la gira del presidente chino, Xi Jinping, por la región después de asistir a la cumbre de BRICS en Brasil.
"China es el socio más importante para nuestro desarrollo. Nadie ha sido tan generoso como China", comentó Capuñay, recordando que el fondo de infraestructura se aumentó a 20.000 millones durante la visita de Xi.
"Vemos el compromiso de China, que el beneficio de su economía se amplía a otras economías de Asia y el Pacífico", señaló el diplomático, haciendo referencia a los encuentros preparatorios para la reunión de líderes económicos del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se celebrará del 10 al 11 de noviembre en Beijing.
El presidente peruano, Ollanta Umala, participará en la reunión y realizará una visita de trabajo a China. Perú, junto a México y Chile, son los tres miembros latinoamericanos de la APEC, que agrupa a 21 economías de la región Asia-Pacífico.
El embajador destacó el Tratado de Libre Comercio que tiene Perú con China. Según Capuñay, los intercambios comerciales bilaterales se han incrementado mucho, pero están lejos de ser satisfactorios, pues Perú quiere ampliar y diversificar sus exportaciones, vendiendo más fruta, artesanía, productos pesqueros y medicinales al mercado chino.
"Es importante la transferencia de la tecnología china, porque ayuda mucho a las pequeñas empresas peruanas a aumentar su capacidad de producción y mejorar la calidad de sus productos", afirmó el embajador.
Capuñay reveló que, según los contratos firmados del año 2014-2015, Perú superará a los Estados Unidos para convertirse en el segundo mayor exportador de uvas a China en 2015.
Además, la relación entre Perú y China se elevó el año pasado al nivel de asociación estratégica integral, de la que el diplomático destacó tres elementos: hacer más fuerte la complementariedad económica, la transferencia tecnológica y la relación entre los dos pueblos.
"Entendemos los dos países que estamos en una situación de win-win y tenemos la voluntad de trabajar juntos", aseveró Capuñay.
Durante la visita del presidente peruano, Perú analizará con China la posibilidad de crear un nuevo mecanismo de diálogo político a nivel de cancillería y realizará intercambios en temas relativos a la organización de las reuniones de la APEC, puesto que Perú será la anfitrión en 2016.
También podrían hablar del proyecto del ferrocarril Atlántico-Pacífico, en el que China, Perú y Brasil colaborarán, según se pone de manifiesto en la declaración conjunta publicada en julio de 2014 durante la visita del mandatario chino a Brasil.
"Hay limitaciones, pero los tres vamos a trabajar juntos", aseguró Capuñay, confirmando los grandes beneficios de la vía férrea, que permitirá que aumente el comercio entre el Atlántico y el Pacífico. "Va a ser como la columna central de América del Sur", comentó el diplomático.
Coincidiendo con uno de los tres temas clave de las reuniones de la APEC -la conectividad- Capuñay considera que, además de la conectividad física como el tren o la ruta de la seda en Asia, también es muy importante la conectividad institucional, los vínculos que se pueden establecer entre instituciones como las cámaras de comercio, las bolsas de valores, las universidades, etc.
"La ruta marítima de la seda del siglo XXI es la conectividad institucional, que nos puede acercar más", expresó el embajador.