BEIJING, 14 nov (Xinhua) -- La vigorosa promoción de la cooperación económica y comercial internacional por parte de China juega un papel importante en el impulso de la profunda reforma económica y apertura que está llevando a cabo el país, así como en la realización de una situación de beneficio mutuo en la cooperación internacional.
El último enfoque de China en este propósito consiste en una promoción activa de la puesta en marcha del proceso del Area de Libre Comercio de Asia-Pacífico (FTAAP, por sus siglas en inglés) en las últimas reuniones del Foro de Cooperación Económica de Asia-Pacífico (APEC), las cuales se acaban de celebrar en la capital china de Beijing.
El establecimiento de la FTAAP emerge como otro importante enfoque para un mundo con una economía abierta, donde una China más abierta puede profundizar su proceso de reforma y apertura, el cual comenzó en 1978, y hacer mayores contribuciones al resto del mundo.
La profundización de la reforma es una fuerza motriz perpetua para el desarrollo de China, mientras que acelerar el proceso de apertura es un impulso a la reforma.
Para profundizar la reforma de manera integral, China necesita avanzar su apertura en un estándar más alto, dijo el presidente chino, Xi Jinping, durante su discurso en la Cumbre de Directores Ejecutivos de la APEC el pasado domingo.
Para alcanzar los objetivos de reforma, es inevitable crear una nueva situación de apertura de alto nivel.
En el proceso, China ha propuesto o promovido una serie de iniciativas y planes, como la iniciativa de la Zona Económica de la Ruta de la Seda, la Ruta de la Seda Marítima del Siglo XXI, el Banco de Desarrollo de los BRICS, y el Banco de Inversiones de Infraestructuras Asiáticas. En las reuniones de la APEC en Beijing, China prometió contribuir 40.000 millones de dólares estadounidenses para el establecimiento del Fondo de la Ruta de la Seda.
Xi presentó el plan de acción de reforma de China en la Cumbre de Directores Ejecutivos de la APEC el pasado domingo, y dijo que el país asiático espera establecer un sistema económico abierto, rebajar el umbral de acceso al mercado, incrementar la apertura del sector servicios, incluido el mercado de capitales, y abrir más áreas interiores y fronterizas a la inversión extranjera.
La vigorosa promoción de la reforma y la apertura por parte de China no sólo beneficia a la propia China, sino también al resto del mundo.
Por otro lado, la apertura ayudará a China a digerir su superávit de capacidad productora, a diversificar su inversión en reservas extranjeras, y a ajustar y optimizar su estructura económica. Asimismo, contribuirá a permitir a China desempeñar un papel más activo en la estructura económica política y global mediante una mayor apertura al mundo exterior.
Además, China todavía necesita recibir inversión extranjera, importar tecnologías y atraer talentos, con el fin de desarrollar las nuevas ventajas del país en la competición global, lograr nuevo espacio para el crecimiento económico, forjar una versión actualizada de la economía y promover el intercambio libre y ordenado de los recursos internacionales y domésticos.
En este camino, China puede avanzar en la reforma, la transformación y el desarrollo a través de la apertura.
A principios de noviembre, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, la agencia de máximo nivel del Gobierno que se encarga de la planificación económica, enmendó por sexta vez el Catálogo de Industrias para la Orientación de la Inversión Extranjera, reduciendo los artículos restrictivos de 79 a 35.
La enmienda también levanta aún más las restricciones al capital propio extranjero, reduciendo de 43 a 11 los artículos en las categorías de "empresas conjuntas de capital propio" y "empresas conjuntas contractuales". En la categoría de "propiedad china de la participación de control", se pasa de 44 a 32 artículos.
Por otro lado, China se está moviendo gradualmente desde una estrategia de apertura consistente en "dar prioridad a la introducción en China" a un patrón de "conceder igual importancia a la introducción en China y a la internacionalización".
Los dividendos generados por las renovadas políticas de apertura de China han seguido inyectando nuevo vigor y vitalidad a la reactivación económica global, empantanada en una lenta recuperación.
El mundo se está acercando a una percepción más profunda de las políticas de comercio exterior de China, que juegan el rol de conectar al gigante asiático con el resto del mundo y que benefician a todas las partes. Mientras se abre más al mundo exterior, China también puede importar mercancías valoradas en más de 10 billones de dólares estadounidenses en los próximos cinco años.
Como ha expuesto un sitio web de noticias español, el status quo de los países acogidos a acuerdos de libre comercio indica que los productos chinos nunca los "inundan" y que su comercio con China va en su favor.
Mientras, la exportación de capital de China está realmente aportando una savia vital para que la economía global evite el riesgo de debilitarse.
A la luz de las dificultades financieras enfrentadas por Asia para materializar la interconectividad y el acceso mutuo, China ha prometido contribuir con 40.000 millones de dólares para poner en marcha un Fondo de la Ruta de la Seda, con el fin de que aporte respaldo financiero para la construcción de infraestructuras, recursos para las exploración y para la cooperación industrial para los países situados a lo largo de la Zona Económica de la Ruta de la Seda o de la Ruta Marítima de la Seda del siglo XXI".
Además, China donará 10 millones de dólares para desarrollar las instituciones de la APEC y para llevar a cabo la cooperación pragmática. Se estima que en la próxima década, la inversión saliente de China alcanzará un total de 1,25 billones de dólares. La exportación de capital de China dará impulso al crecimiento económico mundial.
Xulio Ríos, un experto español sobre China, afirmó que el gigante asiático cuenta con estrategias inclusivas de apertura. Con este tipo de estrategias, los países vecinos estar capacitados para compartir los beneficios del ascenso de China, y China puede hacer de su rejuvenecimiento un factor activo para la totalidad de Asia.