El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó hoy en términos enérgicos el letal ataque suicida con bomba ocurrido en un partido de voleibol en Afganistán en el que al menos 50 civiles murieron.
El jefe de la ONU "condena este ataque contra hombres, mujeres y niños que disfrutaban de un evento deportivo en la comunidad y lo describe no sólo como una grave violación a las leyes afganas e internacionales, sino como fundamentalmente aborrecible", se indicó en una declaración emitida por el vocero de Ban.
El 23 de noviembre, un agresor suicida detonó un dispositivo explosivo improvisado en un campo deportivo en el distrito de Yahya Khel en la provincia sudoriental afgana de Paktika. Al menos 50 civiles que asistían al partido de voleibol murieron de inmediato y otras 60 personas resultaron heridas.
Según informes, entre los muertos y heridos hubo muchos niños.
El secretario general expresó su profunda solidaridad con los familiares de los muertos y heridos y con el pueblo de Afganistán que se rehúsa a ser intimidado por tales ataques.
Ban "espera que los responsables sean presentados pronto ante la justicia", se indicó en la declaración.
El 2014 ha sido el año más letal para los civiles en Afganistán desde 2009. La Misión de Asistencia de la ONU en Afganistán (Unama) ha documentado un creciente número de bajas civiles atribuidas, en gran parte, a un mayor uso de dispositivos explosivos improvisados.