La Casa Blanca advirtió hoy que imponer sanciones adicionales contra Irán sería "contraproducente" luego de que la república islámica y las principales potencias acordaron extender sus conversaciones nucleares otros siete meses.
"Seguimos creyendo que añadir sanciones mientras las negociaciones están en curso sería contraproducente", dijo el vocero de la Casa Blanca, Josh Earnest, en respuesta a algunos legisladores que piden incrementar las sanciones contra Teherán luego de que los negociadores fallaron en su intento por lograr un acuerdo antes de la fecha límite de hoy tras intensos días de conversaciones en Viena, capital de Austria.
"La preocupación que tenemos es que imponer sanciones adicionales podría dejar a algunos de nuestros socios con la impresión de que este régimen de sanciones es de naturaleza más punitiva que otra cosa y podría hacer que aparezcan algunas fracturas en la coordinación internacional", señaló Earnest en la conferencia de prensa diaria.
A pesar de que el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, dijo que se lograron "avances reales y significativos" en las conversaciones en Viena, Irán y las seis potencias, Reino Unido, China, Francia, Rusia y Estados Unidos más Alemania, no lograron reducir sus diferencias sobre los asuntos fundamentales para un acuerdo integral.
Las partes no pudieron llegar a un acuerdo sobre el número de centrifugadoras que Irán tendrá permitido mantener bajo acuerdo ni sobre el ritmo al cual serán suspendidas las sanciones contraTeherán.
En cambio, las partes decidieron continuar las conversaciones hasta el 1 de julio y buscar un acuerdo marco para el 1 de marzo, con el inicio de las conversaciones a nivel de expertos prevista para diciembre.
La representante republicana Ileana Ros-Lehtinen, pidió "nuevas sanciones" contra Irán y dijo que "la administración Obama debe darse cuenta de que los iraníes no toman en serio estas conversaciones y debe abandonar las negociaciones".
"Ahora más que nunca, es crítico que el Congreso promulgue sanciones que no den a los ulemas de Irán otra opción más que desmantelar su programa nuclear ilícito", indicó en una declaración el senador republicano Mark Kirk. "El Congreso no dará a Irán más tiempo para fabricar una bomba nuclear".
A pesar de reconocer que el régimen de sanciones ha desempeñado un papel importante para llevar a Irán a la mesa de negociaciones, Jeffrey Rathke, vocero del Departamento de Estado, enfatizó que "las sanciones por sí solas no nos van a llevar a lograr un acuerdo integral".
Conforme al acuerdo provisional alcanzado en Ginebra en noviembre del año pasado, Irán aceptó suspender algunas actividades nucleares delicadas a cambio de una suspensión limitada de las sanciones por parte de Occidente, mientras se busca un acuerdo integral a través de negociaciones.
Irán y las seis potencias acordaron en julio extender sus conversaciones otros cuatro meses hasta el 14 de noviembre porque no habían podido reducir las diferencias significativas en torno a asuntos fundamentales en los últimos seis meses.