MONTEVIDEO, 30 nov (Xinhua) -- Los uruguayos llevan a cabo este domingo la segunda vuelta electoral entre el oficialista Tabaré Vázquez y el opositor Luis Lacalle Pou, que será recordada en el futuro como un día con mucha lluvia.
La contingencia climática en buena parte del país llevó a retrasar el inicio de la votación en algunos lugares, situación que además dificulta el traslado de los votantes, particularmente los de mayor edad.
"No recuerdo tanta lluvia en una jornada electoral", mencionó esta mañana el presidente José Mujica en más de una entrevista que ofreció a los canales de televisión.
Aclaró que de cualquier manera "los obstáculos se pueden igual vencer", por lo que espera un buen nivel de participación.
"Habrá que hacer tortas fritas", bromeó Mujica consultado sobre el mal tiempo y aludiendo a la tradición local de comer esos pasteles en días de lluvia, luego de votar temprano en el barrio Cerro en el oeste de Montevideo (capital).
En Uruguay vota históricamente cerca del 90 por ciento del padrón electoral, que incluye a las personas mayores de 18 años.
El sufragio es obligatorio en la nación sudamericana y la norma establece una multa de 751 pesos (31 dólares) en caso de no justificarse por parte del elector su inasistencia por enfermedad o por estar en el exterior.
En calles de la capital y el interior del país, hay pocas señales que indiquen que este domingo se desarrolla una elección para definir el sucesor de Mujica, contrastando con la efervescencia que se tuvo en la primera vuelta del 26 de octubre.
En la primera vuelta, el oficialista Frente Amplio (FA) obtuvo el 47,8 por ciento de los votos, que necesitaba la mitad más uno para evitar el balotaje, mientras que el Partido Nacional (PN) de Lacalle Pou sumó el 30,9 por ciento.
Las encuestadoras proyectan que Vázquez recojerá entre el 53 y el 55 por ciento de los votos y Lacalle Pou entre un 39 y 41 por ciento.
El Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) emitió el pasado 28 de noviembre una advertencia de nivel "naranja" por fuertes tormentas y precipitaciones copiosas en todo el territorio nacional.
El pronóstico se cumplió y en la mayoría de los departamentos comenzó a llover la víspera poco antes de la medianoche y no ha parado en la jornada.
Se esperan lluvias durante 24 horas, además de rachas de viento de entre 75 y 120 kilómetros por hora, así como granizo y actividad eléctrica.
La Corte Electoral informó que fue necesario trasladar cuatro circuitos (mesas de votación) a raíz de inundaciones o desperfectos asociados al agua en los departamentos de Florida y Canelones en el sur, así como en el oriental Lavalleja y en el ocdidental Soriano.
El vicepresidente de la Corte, Wilfredo Penco, informó que "las situaciones más significativas se subsanaron" y todos los circuitos ya funcionan.
Medios locales reseñan que en zonas rurales algunas mesas de votación trabajan sin luz.
Unos 7.000 efectivos de seguridad velan por mantener el orden y custodiar urnas y circuitos, aunque tradicionalmente no se registran incidentes graves.
Las proyecciones de escrutinio de las consultoras privadas, que los candidatos suelen dar por válidas y desencadenan festejos, se conocerán a partir de las 20:30 horas locales (22:30 GMT).