Un total de 21 personas heridas, entre ellas 15 policías, además de 33 detenidos, dejó el desalojo de manifestantes en el kilómetro 260 de la carretera a la comarca El Tule, en el sur de Nicaragua, informó hoy la Policía Nacional (PN).
La jefa de la PN, primera comisionada Aminta Granera, dijo que un subinspector policial se encuentra grave y es intervenido quirúrgicamente, tras sufrir la perforación del pulmón derecho por arma de fuego.
Granera convocó este miércoles a periodistas para informar de los sucesos ocurridos en el kilómetro 260 de la carretera Managua-San Carlos, en la comarca El Tule, donde unas 300 personas mantuvieron un bloqueo desde el pasado 17 de diciembre.
La jefa policial señaló que un suboficial de la PN tiene un trauma cráneo facial grave, con pérdida de piezas dentales, una mujer policial tiene fracturas en las rodillas, mientras el resto de efectivos se encuentran con lesiones entre leves y graves.
"Todos los lesionados, entre policías y civiles, fueron trasladados a los hospitales de provincias cercanas a la región de El Tule", enfatizó Granera.
Añadió que se detuvieron a 33 personas para ser investigadas por daños a la propiedad y al comercio, por lesiones graves y exposición de personas al peligro, quienes serán puestas a la orden de las autoridades competentes.
Según Granera, a las 05:00 horas locales (12:00 GMT) de este miércoles, tropas antimotines se presentaron en ese retén de la carretera hacia El Tule, con el fin de pedir a las 300 personas desalojar la vía, sin embargo ante la negativa de éstos procedieron al desalojo con gases lacrimógenos.
La mayoría de la gente se dispersó a las zonas aledañas, sin embargo 100 personas se reagruparon, quemaron el puesto policial de El Tule, y atacaron a las fuerzas policiales con armas de fuego, machetes, piedras y palos.
"Las tropas especiales respondieron con gases lacrimógenos y balas de gomas, y recuperaron en el primer encuentro la pipa de combustible en El Tule", subrayó Granera.
Añadió que esas personas amenazaron con quemar una cisterna de 1.000 galones de combustible.
Granera anunció que la circulación en esa tramo de la carretera Managua-San Carlos se encuentra restablecida y en total normalidad.
Añadió que en un tramo de la carretera hacia la provincia de Rivas, 11 kilómetros al sur de Managua, otro grupo de personas amenazó con quemar otra cisterna, lo cual no sucedió.
"En Rivas la situación fue distinta, aunque hubo un forcejeo cuerpo a cuerpo entre las fuerzas especiales y los manifestantes, pero el señor Octavio Ortega amenazó con con legarle fuego a la pipa de combustible, dichosamente no le función el encendedor", explicó Granera.