El Ministerio Público (MP) de Venezuela privó de libertad la noche de este miércoles a los dos principales representantes de la mayor de las farmacias del país "Farmatodo", quienes fueron detenidos el pasado 31 de enero tras acusárseles de promover irregularidades en la distribución de alimentos y productos de higiene personal.
El presidente Ejecutivo de la cadena distribuidora, Pedro Angarita Azpúrua, y el vicepresidente de Operaciones, Agustín Álvarez, fueron imputados por la presunta comisión de delitos de boicot y desestabilización de la economía, contemplados en la Ley Orgánica de Precios Justos.
Angarita y Álvarez fueron puestos a la orden del Ministerio Público y recluidos en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), luego de que los fiscales que adelantan el caso expusieran ante una audiencia "elementos de convicción".
La privativa de libertad fue determinada por el Tribunal 41 de Control del Área Metropolitana de Caracas, y surge después de que el Estado venezolano abriera el pasado lunes un procedimiento administrativo contra Farmatodo.
La red, que aglutina a 167 farmacias en todo el territorio venezolano, había sido inspeccionada en labores de fiscalización, y se corroboró que mantenía cajas de cobro vacías mientras que se evidenciaban largas filas de personas para el pago de los productos.
El gobierno venezolano ha arreciado la lucha en contra de las instancias de producción o comercialización que incumplan con la correcta distribución de rubros estratégicos para la población venezolana.