Disminuye el número de restaurantes que ofrecen carne de perro

Actualizado a las 03/06/2015 - 17:59

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Uno de los perros que rescataron los voluntarios protectores de los animales en una jaula en Yulin, en 2014. HOU LIQIANG / CHINA DAILY

Guangzhou,20/05/2015(El Pueblo en Línea)-Cada vez es más difícil encontrar restaurantes que sirvan carne de perro en Guangzhou, provincia de Guangdong, según informó este lunes el Guangzhou Daily.

El número de establecimientos que ofrecen la polémica carne ha disminuido de manera considerable, principalmente debido a las nuevas normas para la protección de los animales.

Guangzhou, donde comer carne de perro es una tradición, lanzó una campaña para acabar con las empresas que venden carne de perro de manera ilegal sin un certificado de cuarentena.

Según una normativa del Ministerio de Agricultura publicada en 2013, un certificado de cuarentena, que cuesta entre 200 yuanes (34 dólares) y 300 yuanes, sólo es válido para un perro o gato, por lo que tramitar un gran número de certificados costaría demasiado dinero.

Muchos restaurantes que antes vendían mucha carne de perro no podían pagar las pruebas de cuarentena y tuvieron que cerrar.

Una conocida carnicería de carne de perro que lleva funcionando desde 1963 cerró en junio del año pasado y ahora es una ferretería.

Una mujer que vive en una calle conocida por la venta de carne de perro ha sido testigo de la crisis en este sector. "La calle solía estar repleta de clientes que venían exclusivamente a comprar carne de perro. Ahora la gente elegir no comer esta carne por la concienciación sobre la protección de los animales", dijo.

La Administración Local de Alimentos y Medicamentos advierte continuamente de los riesgos de comer carne no convencional. Los animales de origen no certificado pueden portar virus nocivos para la salud humana.

La crisis del sector de la carne de perro no solo se debe a los nuevos controles y restricciones, sino también a la concienciación de la sociedad sobre la protección de los animales.

Una mujer, de apellido Xiao, dijo que nunca come perro y trata de convencer a otros para que tampoco lo hagan. Cree que los perros son compañeros naturales de los hombres y nunca deben utilizarse como alimento.

La polémica sobre la carne de perro ha hecho estragos en China durante muchos años, e incluso se produjeron episodios violentos en Yulin por este motivo, región autónoma Zhuang de Guangxi, el año pasado.