(Izquierda) Ma Shuwen, de 9 años, y su hermano de pie junto a un lago en su ciudad natal en el condado de Balihe, provincia de Anhui, el 11 de enero de 2015. (Derecha) Sus padres de pie junto al lago del Oeste en Hangzhou, provincia de Zhejiang, el 15 de enero de 2015. Sólo se ven dos veces al año durante las vacaciones de verano y el Festival de Primavera. [Foto/Xinhua]
Pekín, 21/04/2015(El Pueblo en Línea)-Los niños trabajadores inmigrantes en las ciudades tienen dificultades para acceder a escuelas secundarias públicas
En familias de inmigrantes es más probable que haya delincuencia juvenil, según un informe sobre la educación.
"Existe una relación evidente entre los factores familiares y la delincuencia juvenil. La mala estructura familiar, un método inadecuado de educación familiar y un entorno económico y cultural familiar pobre son factores clave que causan la delincuencia juvenil", según el informe, publicado por el Instituto de Investigación de Educación 21st Century el lunes.
El estudio analizó la reforma de la educación de China en 2014, incluyendo educación, reforma de admisión en primaria y secundaria, la reforma del examen de admisión de la universidad y nuevas políticas para mejorar la educación de los niños inmigrantes.
"El 36,7% de los delincuentes juveniles ni van a la escuela ni trabajan, el 27.3% son niños que se quedan en sus pueblos natales cuando sus padres trabajan como en otras ciudades, y el 26,9 % son niños de familias inmigrantes que viven con sus padres en las ciudades", dijo Zhang Liangxu, subdirector del Centro de Investigación Infantil y Juvenil de China.
Zhang y su compañero Zhao Huijie realizaron una encuesta en un centro de detención juvenil. Descubrieron que el 9,1% de los delincuentes juveniles eran niños de familias inmigrantes que se quedaron en sus pueblos natales mientras que sus padres trabajaban en las ciudades, y el 9% eran niños de familias inmigrantes que vivían en las ciudades con sus padres.
"Los niños de familias inmigrantes no fueron capaces de adaptarse al nuevo entorno sin problemas. Cuando los niños se mudan a ciudades con sus padres, necesitan integrarse en la vida urbana rápidamente. Sin embargo, algunos niños se trasladan a las ciudades a una edad muy temprana y sus padres, ocupados con el trabajo, no proporcionan suficiente cuidado y atención a estos niños. Los jóvenes podrían adaptarse a la vida de ciudad de la manera equivocada. Por otro lado, la ciudad no es lo suficientemente tolerante con los nuevos residentes", escribió Zhang en el informe.
El rápido desarrollo económico de China ha atraído a muchos trabajadores inmigrantes a las ciudades. Sin embargo, debido al sistema de registro estricto de residencia, los hijos de trabajadores inmigrantes no pueden inscribirse en las escuelas secundarias públicas de las ciudades. Muchos de ellos tienen que separarse de sus padres y quedarse en sus pueblos de origen para asistir a clase. Algunos pueden vivir con sus padres para asistir a escuelas primarias en las ciudades, pero debido a recursos limitados en el sistema educativo, la mayoría no puede acceder a una buena educación.
Según el Censo Nacional de 2010, 35,8 millones de menores de 18 años emigraron con sus padres y otros 61 millones se quedaron en sus zonas rurales de origen mientras sus padres trabajaban en las ciudades.
Según el informe, un 20% de los 278,9 millones de niños en el país no pudieron acceder a las escuelas públicas a finales de 2013. El gobierno central exigió en 2012 a los gobiernos locales que permitan a los niños de familias inmigrantes asistir a escuelas de secundaria y hacer el examen de de acceso a la universidad.
En 2014, mientras sigue creciendo la población en las grandes ciudades, urbes como Pekín, Shanghai y Guangzhou comenzaron a inscribir a los niños de familias inmigrantes en las escuelas públicas de estas ciudades.