América Latina da bienvenida a estrechas relaciones con China, dicen expertos

Actualizado a las 07/06/2015 - 09:00

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La cooperación entre China y América Latina se ha profundizado rápidamente en años recentes y ha sido ampliamente bien recibida por los países en desarrollo del continente americano, comentaron funcionarios y expertos, al señalar que las estrechas relaciones con China son bienvenidas por América Latina.

En ocasión de un foro que inició el viernes organizado por el Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) sobre la economía de América Latina y el Caribe, Xinhua entrevistó a varios expertos y altos funcionarios para que expliquen las razones de esta tendencia.

"Estoy muy complacido de ver que China y América Latina se acercan de una manera muy estratégica", declaró en su oportunidad la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Barcena Ibarra, y agregó que el volumen del intercambio de productos entre China y América Latina se ha multiplicado en cerca de 21 veces entre los años 2000 y 2013.

La política de China es congruente con las necesidades de América Latina, señaló Barcena, explicando que desde el año pasado y hasta hace menos de dos semanas, los líderes chinos anunciaron claramente que la cooperación entre China y América Latina no se limitará al intercambio de bienes, sino que se expandirá a través de inversiones, comercio y cooperación financiera en más áreas como infraestructura, recursos naturales, seguridad alimentaria, y manufactura, entre otros.

Otra señal que refleja la mutua confianza entre China y las naciones de América Latina es que los créditos que otorga China a América Latina no tienen condiciones, "lo cual es una muy buena noticia para América Latina, dado que América Latina siempre ha estado muy condicionado por el Fondo Monetario Internacional (FMI), por el Banco Mundial y por todos", comentó Barcena.

"Podemos ver que la voluntad de China es acercarse a América Latina, entender las necesidades de América Latina", indicó.

Por su parte, Enrique García, presidente del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), comentó, "Admiro lo que China ha hecho y la presencia de China en América Latina se diversifica más".

En su opinión, China será un importante proveedor de inversión de calidad.

"América Latina necesita invertir una proporción para hacer un buen trabajo. En mi opinión, tiene que invertir un mínimo de 300.000 a 400.000 millones de dólares anuales (para la construcción de infraestructura), pues de otra forma no será suficiente. Por eso es muy importante atraer recursos del exterior, no solamente préstamos, sino también inversiones directas", dijo.

Por otra parte, el establecimiento del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII) "es una muy buena iniciativa y espero que nuestro banco pueda tener algún tipo de relaciones en el futuro", dijo García.

Un experto de la OCDE indicó que la asociación con China ayuda a los países de América Latina a mantener un continuo desarrollo.

China ha hecho grandes contribuciones al desarrollo de los países de América Latina en años recientes como un importante elemento para ayudar a América Latina a mantener un continuo desarrollo, afirmó Mario Pezzini, director del Centro de Desarrollo de la OCDE, en una reciente entrevista con Xinhua.

Mientras varios países desarrollados han estado atrapados en una crisis económica desde 2008, los países en desarrollo de América Latina han logrado mantener "un significativo índice de crecimiento", mencionó Pezzini.

Acerca de la razón por la cuál esos países tuvieron una gran capacidad de recuperación ante la crisis, Pezzini declaró que aparte de mejorar las políticas macroeconómicas y de ampliación de la clase media, la asociación con China también es un importante elemento que "indudablemente es útil".

Las cifras hablan por sí mismas: el volumen de comercio entre China y los países de América Latina alcanzó un monto superior a 260.000 millones de dólares, y las inversiones de China en la región ascendieron a más de 80.000 millones de dólares en 2014, indican cifras oficiales de China.