BRASILIA, 7 oct (Xinhua) -- El Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU) de Brasil informó hoy que rechazó por unanimidad el reporte contable del gobierno de la presidenta Dilma Rousseff correspondiente al último año de su primer mandato (2014).
Los magistrados indicaron que siguieron el dictamen del juez relator, Augusto Nardes, quien sostuvo que las cuentas públicas no pueden ser aprobadas por la presunción de irregularidades fiscales.
Nardes encontró que la Tesorería Nacional transfirió fondos públicos a bancos para cubrir gastos de programas sociales como "Bolsa Familia", seguro de desempleo y bonificaciones salariales.
De acuerdo con el Tribunal, los bancos públicos prestaban en la práctica valores a la Unión, lo que está prohibido por la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF), porque puede considerarse como una operación de crédito.
El Congreso Nacional de Brasil será ahora el encargado de otorgar la última palabra sobre el tema, ya que el fallo del TCU no tiene ningún efecto jurídico y solamente constituye una recomendación para los legisladores.
El gobierno rechazó la evaluación del TCU, con el argumento de que la práctica ocurrió durante breves períodos.
El Abogado General de la Unión (AGU), Luiz Inácio Adams, presentó un recurso en el que cuestionó al juez relator para pronunciarse sobre el caso, argumentos que a su vez fueron desestimados por el TCU que apoyó a Nardes.
El rechazo del órgano de Cuentas de la Unión puede ser utilizado por la oposición como argumento para la apertura de un juicio político contra la presidenta Rousseff.