KIGALI, 7 oct (Xinhua) -- Los supervivientes del genocidio en Ruanda de 1994 protestaron por la decisión tomada por un tribunal francés para desestimar el caso contra un sacerdote ruandés acusado de genocidio.
El tribunal francés descartó el martes el caso contra el padre Wenceslas Munyeshyaka, quien fue condenado en ausencia por genocidio por un tribunal ruandés.
El caso de Munyeshyaka fue remitido al tribunal francés por el Tribunal Penal Internacional para Ruanda con sede en Tanzania.
En agosto, fiscales franceses pidieron rechazar el caso por "falta de evidencia".
Munyeshyaka, ex párroco de la iglesia de la Sagrada Familia en Kigali, capital de Ruanda, durante el genocidio de 1994, fue acusado de participar en los asesinatos de mujeres de la minoría tutsi que buscaron refugio en su iglesia, así como de participar en su entrega a las milicias para ser violadas.
El Dr. Jean Pierre Dusingizemungu, presidente de Ibuka, una asociación que representa a los supervivientes del genocidio, dijo hoy a los reporteros que la decisión del tribunal no sorprendió a los supervivientes porque el tribunal francés "está acostumbrado a negar la justicia".
"Condenamos la decisión del tribunal en los términos más enérgicos porque Munyeshyaka es un criminal genocida y muchos supervivientes pueden atestiguar al respecto", dijo Dusingizemungu.
El presidente de Ibuka agregó que "esto es una burla para los supervivientes y las víctimas y pedimos al gobierno francés extraditar a Munyeshyaka a Ruanda para que enfrente la justicia".
El Dr. Jean Damascene Bizimana, secretario ejecutivo de la Comisión Nacional para el Combate al Genocidio de Ruanda, dijo que la decisión del tribunal fue otra manifestación más de la constante reticencia de Francia a obligar a rendir cuentas a los responsables de asesinatos masivos durante el genocidio de 1994.
El mes pasado, el tribunal francés determinó que Joseph Habyarimana, un sospechoso buscado en Ruanda por cargos de genocidio, no sería extraditado a este país del centro de Africa porque los crímenes no eran delitos en ese momento y porque las leyes no pueden aplicarse de forma retroactiva.
En mayo, el tribunal de apelación francés liberó al Dr. Charles Twagira, quien es acusado de participar en el genocidio.
El gobierno ruandés ha estado persiguiendo a los acusados de participar en el genocidio. Hasta ahora, siete personas han sido extraditadas desde Uganda, Canadá, Estados Unidos y Tanzania para ser enjuiciadas en Ruanda.
Todavía se están rastreando más prófugos, incluyendo al empresario Felicien Kabuga, acusado de financiar el genocidio.