SANTIAGO/WASHINGTON/WELLINGTON, 7 oct (Xinhua) -- Varios países, organizaciones y políticos han reclamado en las últimas horas más transparencia en relación al polémico Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por siglas en inglés), recientemente alcanzado por 12 países.
En México, senadores de los tres partidos mayoritarios de la oposición, tanto de derecha como de izquierda, se quejaron de que los contenidos del TPP "permaneciesen en secreto y el Senado de la nación haya sido excluido de la negociaciones", según informó el diario La Jornada este martes.
El TPP, encabezado fundamentalmente por Estados Unidos y Japón, fue firmado el lunes en Atlanta, en el estado de Georgia, por Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Singapur, Malasia, Vietnam, Brunei, Chile, México y Perú, además de por sus dos principales patrocinadores.
El acuerdo está diseñado para liberalizar el comercio entre las partes, esencialmente a través de la rebaja de los aranceles y la estandarización de la legislación relativa a la propiedad intelectual, los derechos laborales, la protección medioambiental y las disputas entre Estados e inversores.
Está previsto que los contenidos del acuerdo se hagan públicos solo antes de las votaciones en los distintos parlamentos nacionales, un trámite obligatorio para que entre en funcionamiento en los 12 países signatarios.
Una organización de defensa de los derechos digitales chilena exigió este miércoles que los contenidos del hermético acuerdo se hagan públicos.
La organización no gubernamental Derechos Digitales criticó que el acuerdo haya sido revisado solo por el Gobierno y por representantes de los equipos negociadores involucrados en unas negociaciones que se prolongaron durante años.
"Ahora más que nunca es necesario que los textos de la negociación, celosamente guardados a lo largo de los últimos siete años, sean liberados, de modo que podamos conocer la magnitud real de los costes y beneficios asociados a suscribir esta alianza comercial", argumentó la ONG en un comunicado.
El pacto debo ser ratificado por el poder legislativo de cada país antes de que pueda entrar en efecto, pero los legisladores no pueden enmendar sus contenidos, apuntó Derechos Digitales.
"Desgraciadamente, los parlamentos no pueden proponer cambios (...) Sus únicas opciones son aceptar o rechazar el texto en su totalidad", expuso la ONG.
Esta organización, fundada en 2004 por un grupo de abogados de la Universidad de Chile, advirtió de que "este hermetismo es incompatible con la democracia del siglo XXI" y describió la falta de transparencia en el proceso de negociación del TPP como "propia de regímenes autoritarios".
"No hay justificación para que un tratado de tan amplio alcance se haya negociado a espaldas de la gente", argumentó la organización, que demandó a los legisladores un análisis atento de los contenidos del TPP.
En EEUU, algunos funcionarios han calificado el acuerdo con los países de la cuenca del Pacífico como una vía para crear empleo y escribir las normas del comercio internacional aunque la candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, manifestó el miércoles que no lo respalda.
"Por lo que hasta ahora conozco, no puedo apoyar este acuerdo", declaró en un comunicado. Añadió que los tratos comerciales deben responder a "pruebas claras" de creación de empleo , aumento salarial e impulso de los intereses de seguridad nacional en EEUU.
Sindicatos del país, grupos medioambientales y organizaciones de consumidores y atención sanitaria se han manifestado en contra debido a las varias preocupaciones que les provoca.
"Estamos decepcionados de que los negociadores se apresuraran a concluir el TPP en Atlanta, dadas todas las inquietudes que han presentado partes interesadas y miembros del Congreso estadounidense", apuntó en un comunicado Richard Trumka, presidente del poderoso sindicato AFL-CIO.
Según añadió, "vamos a evaluar los detalles con atención y a trabajar para derrocar este acuerdo comercial corporativo si no está a la altura".
Algunos republicanos influyentes y favorables al pacto también se mostraron escépticos.
"Mientras los detalles aún están apareciendo, me temo que este acuerdo parece quedarse desafortunadamente muy corto", dijo Orrin Hatch, máximo responsable republicano del Comité de Finanzas del Senado, que tiene jurisdición sobre comercio.
La directora gerente del Fondo Monteatio Internacional (FMI), Christine Lagarde, declinó el miércoles hacer comentarios sobre el posible impacto del TPP, argumentando que es muy pronto para manifestarse.
Dado que el contenido del tratado no se ha hecho de momento público, sería prematuro predecir cómo podría afectar a los países individualmente, como Perú, o a la región latinoamericna, anotó Lagarde en Lima en las reuniones anuales entre el FMI y el Banco Mundial (BM).
En Nueva Zelanda, el principal partido de la oposición, el Partido Laborista, subrayó el miércoles que no se sentirá vinculado por el controvertido acuerdo si se trata de legislar sobre los derechos de propiedad.
Su portavoz de finanzas, Grant Robertosn, resaltó en un comunicado que su país se ha tirado al río al no conseguir siquiera tratar de proteger el territorio y los hogares neozelandeses de los intereses en el extranjero de las negociaciones sobre el TPP.