BRASILIA, 4 nov (Xinhua) -- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, recibió hoy las credenciales de 22 embajadores extranjeros que representarán a sus naciones en territorio brasileño, entre ellos la de Toto Riyanto de Indonesia rechazada anteriormente.
En febrero pasado, Rousseff no quiso recibir la carta credencial del diplomático después de que el gobierno del país asiático reafirmó su decisión de ejecutar al brasileño Marco Archer, condenado a la pena capital en esa nación por tráfico de drogas.
La mandataria brasileña intercedió personalmente ante el presidente indonesio Joko Widodo para pedir clemencia, pero no obtuvo respuesta y Archer fue ejecutado.
Fue la primera vez en la historia en que un brasileño condenado a muerte era ejecutado en el exterior.
Tras la ejecución, la mandataria brasileña llamó al país sudamericano a su embajador en esa nación, con lo que demostró la insatisfacción del gobierno.
Otro brasileño, Rodrigo Gularte, también condenado a muerte en Indonesia por el mismo delito, fue ejecutado en abril pasado.
Rousseff retrasó entonces la recepción de las credenciales del diplomático hasta que se aclarara el estado de las relaciones entre los dos países.
El gobierno indonesio, a su vez, llamó a Riyanto de regreso a Yakarta.
El gobierno de Brasil cuestionó hace dos semanas ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) las barreras de importación impuestas por el gobierno indonesio a las importaciones de pollo brasileño.