El presidente venezolano Nicolás Maduro dijo hoy que sectores de la ultraderecha contratan a grupos de sicarios para perpetrar asesinatos selectivos y en masa, de cara a las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre.
"Tengo en mis manos información de primer nivel y directas de algunos llamados de líderes extremistas pagando 30.000 y 50.000 dólares para comprar gente que se haga pasar por chavista y ponerla a actuar", denunció el jefe de Estado.
Maduro se refirió al asesinato la víspera del dirigente del partido político de oposición Acción Democrática (AD), Luis Manuel Díaz, víctima de disparos con arma de fuego durante un acto proselitista en el estado Guárico, en el centro del país.
La atribución de este asesinato a presuntos grupos armados adeptos al gobierno fue desmentido por el mandatario, quien aseguró que se trata de una "acusación temeraria", al señalar que fueron sicarios los que cometieron el crimen.
En el acto proselitista participaron la esposa del dirigente opositor apresado, Leopoldo López, Lilian Tintori y una de las candidatas al parlamento por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD, alianza de oposición de derecha), Rummy Olivo, también cantante venezolana.
"Ya la investigación científica y los testimonios señalan que esto (la acusación contra el gobierno) es totalmente falso (...) el ministerio del Interior, Justicia y Paz tiene elementos que apuntan a un sicariato por ajuste de cuentas", dijo.
Maduro anunció que emitió una orden a las autoridades respectivas, con el fin de llevar a cabo las investigaciones científicas y criminales que "evalúen a fondo" todos los detalles del homicidio del dirigente opositor.
Una vez reunidos todos los elementos criminalísticos se convocará una rueda de prensa con medios locales e internacionales "para que Venezuela y el mundo sepa la verdad sobre este hecho", agregó.
Maduro transmitió sus condolencias a los familiares de Luis Manuel Díaz, quien fungía como secretario de AD en la ciudad de Altagracia de Orituco, estado de Guárico (centro).
Sobre el pronunciamiento del secretario nacional de AD, Henry Ramos Allup, quien de inmediato atribuyó el asesinato a presuntas bandas delictivas del gobernante Partido Socialista Unido (PSUV), Maduro señaló que tal acusación debe ser evaluada desde la Fiscalía de la República.
"A uno le entra la duda de que es lo que está buscando la oposición, ellos no están haciendo campaña electoral, ellos andan buscando algo, llenar el país de violencia", sostuvo.
Estos grupos de la "derecha extremista" intentan además sobornar a militares de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), con el propósito de promover un golpe militar, afirmó.
"Están moviendo mucho dinero para ver si lograr aunque sea comprar una conciencia en nuestra Fuerza Armada, por eso llamo a la máxima moral, máximo liderazgo y máxima unión cívico-militar" exhortó el mandatario.
El presidente también hizo un llamado a la militancia de la coalición MUD "a no dejarse llevar por la violencia política" e indicó que actuará de manera preventiva para resarcir las intenciones desestabilizadoras.
El asesinato del líder político de oposición fue condenado por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y por la misión de acompañamiento electoral de este organismo instalada en Caracas.