BEIJING, 5 ene (Xinhua) -- Con una firme determinación de profundizar las reformas y una clara comprensión de sus prioridades, el gobierno chino se encuentra en el camino correcto para enfrentar las presiones a la baja en el crecimiento y para alcanzar importantes objetivos económicos en los próximos cinco años.
En los últimos años, la economía del país ha estado sumida en una desaceleración prolongada debido sobre todo a una vacilante recuperación global y a una demanda interna débil. El crecimiento del PIB en el tercer trimestre de 2015 llegó a 6,9 por ciento, el nivel más bajo en seis años.
Hasta diciembre, el índice de los gerentes de compras del sector manufacturero se había ubicado por debajo de la línea de auge y caída de 50 unidades durante cinco meses consecutivos, lo que apunta a una continua presión a la baja, se indicó en datos dados a conocer el viernes.
Tomando en cuenta el hecho de que la economía de China ha entrado en una "nueva normalidad" caracterizada por un crecimiento más lento, el gobierno ha intensificado las reformas para elevar la calidad del crecimiento y la eficiencia y buscar un crecimiento más equilibrado y sostenible.
Desde principios de 2014, China redujo el papeleo y los requisitos de ingreso para las empresas, incluyendo menos restricciones en el capital mínimo registrado y la proporción de efectivo de capital registrado, lo que condujo a un alza en las compañías recién registradas y a una nueva oleada de empresas y de innovación.
El año pasado, el país también continuó con las reformas para optimizar la estructura económica, hacer que la economía esté más orientada hacia el mercado y reducir la carga de las compañías, sobre todo de las pequeñas y medianas empresas.
Mientras comienza a planear para los próximos cinco años, el gobierno confirma el objetivo de lograr un crecimiento económico entre medio y alto y muestra una firme determinación de continuar con reformas importantes.
Una prueba del firme impulso del gobierno encaminado a las reformas es la velocidad con la que se puso fin a la política del hijo único vigente durante décadas.
China sacó la política de "una pareja, dos hijos" dos meses después de anunciar la decisión de poner fin a la política del hijo único. Todas las parejas podrán tener dos hijos a partir de 2016.
En los próximos cinco años, China buscará un crecimiento entre medio y alto para asegurarse de duplicar PIB de 2010 y el ingreso per cápita de los residentes rurales y urbanos para 2020, lo cual requiere un crecimiento promedio anual de más de 6,5 por ciento.
El país también promoverá una mayor sofisticación en el sector industrial, elevará la aportación del consumo al crecimiento y la proporción de urbanización y sacará de la pobreza a toda la población rural para el 2020.
En 2016, se espera que China mantenga el crecimiento económico en un rango razonable y que preste más atención a las reformas estructurales en el lado de la oferta, lo cual puede crear un ambiente mejor para sostener el crecimiento económico de largo plazo como parte de su modelo de desarrollo innovador, coordinado, verde, abierto y compartido.
Las prioridades de este año se basan en la eliminación de la capacidad anticuada, mitigar la carga de las empresas, reducir el inventario del mercado de propiedades, elevar la oferta eficiente y desactivar los riesgos financieros.
Aunque las reformas no concluirán en un día, el país está tomando medidas firmes para lograr el objetivo de construir una sociedad moderadamente próspera para el 2020.