El máximo encargado del combate a la corrupción en China pidió esfuerzos persistentes contra la corrupción para limpiar al Partido Comunista de China (PCCh) e impulsar la fe de la gente en él.
Las declaraciones de Wang Qishan, jefe de la Comisión Central de Control Disciplinario (CCCD), estaban incluidas en un comunicado publicado hoy luego de que presidiera diversos simposios en preparación de la sexta sesión plenaria de la XVIII Comisión Central de Control Disciplinario del PCCh, que tendrá lugar la próxima semana.
El funcionario elogió los resultados de la lucha contra la corrupción del año pasado y afirmó que "la gente tiene una mayor confianza en el PCCh y en el camino del socialismo con peculiaridades chinas. El fundamento político para la gobernación del PCCh es más profundo".
"La gestión estricta del Partido no significa sólo castigar las faltas de la gente corrupta. Requiere la supervisión y limpieza de todo el Partido, con la participación de todos los miembros del Partido", enfatizó Wang.
El funcionario pidió a los miembros del Partido, en especial a los funcionarios de alto nivel, mantener un sentido firme de la disciplina.
Se pidió a los departamentos de control disciplinario ser valientes al perseguir las responsabilidades de los miembros del PCCh corruptos.
Pero también lanzó un llamado a la clemencia y dijo que los funcionarios culpables de una conducta inadecuada relativamente menor deben recibir la oportunidad de reformarse. "Hablar de corazón a corazón con los funcionarios cuyos problemas hayan sido expuestos es una advertencia, así como una muestra de nuestro preocupación por ellos... dejemos que confíen y cuenten con nuestra organización y mantengan sus lealtades".