La jefa de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Federica Mogherini, agradeció al gobierno checo su postura constructiva y equilibrada en torno a la cuestión de los refugiados que pone énfasis en la necesidad de unidad en la Unión Europea.
Mogherini hizo las declaraciones después de reunirse hoy en Praga con el ministro de Relaciones Exteriores de República Checa, Lubomir Zaoralek.
Zaoralek dijo que sus discusiones con Mogherini fueron sobre todo sobre la gestión de la crisis de migrantes. El ministro dijo que ahora el asunto clave del tema de la migración es proteger las fronteras europeas externas.
Tanto Mogherini como Zaoralek apoyan el fortalecimiento del llamado poder duro de la Unión Europea en el escenario internacional.
Zaoralek dijo que Europa debería poder actuar con determinación y mostrar que puede defenderse físicamente.
Mogherini dijo que Europa depende mucho de la diplomacia, pero también utiliza unidades militares conjuntas. La funcionaria añadió que la Unión Europea debería utilizar cada vez más en el futuro las herramientas incluidas en los tratados.