En su último discurso sobre el Estado de la Unión el martes por la noche, el presidente de EEUU, Barack Obama, defendió su política exterior pregonando el "liderazgo estadounidense" basado en el sabio uso de su poderío militar y la movilización de una amplia coalición para lidiar con los retos mundiales.
Con un aumento de las críticas en los últimos siete años por su debilidad y vacilación a la hora de utilizar recursos militares para hacer frente a retos de seguridad, Obama dijo que las soluciones a los problemas globales importantes necesitan más que "fuertes palabras y llamamientos a bombardear en alfombra a civiles".
"Eso puede funcionar como una frase con gancho para la televisión, pero no para pasar el examen del escenario mundial", añadió.
Obama estaba supuestamente respondiendo a las críticas de los candidatos presidenciales republicanos que apuntan a que evita continuamente las peticiones para enviar tropas al extranjero para luchar contra los militantes del Estado Islámico (EI) en Oriente Medio, o derrocar al presidente sirio Bashar al-Assad para acabar con la prolongada guerra civil en Siria.
Los críticos republicanos también han acusado a Obama de rechazar una intensificación de los ataques aéreos de EEUU contra el EI en Siria y el norte de Irak, permitiendo que el grupo terrorista continúe suponiendo una grave amenaza de seguridad para Occidente, incluyendo EEUU.
"Tampoco podemos intentar tomar el control y reconstruir cada país que cae en crisis. Eso no es liderazgo; es una receta para entrar en un atolladero, derramando sangre estadounidense y capital, lo que al final nos debilita", dijo Obama, citando las lecciones de las guerras de Vietnam e Irak.
El presidente subrayó que en cuanto a las preocupaciones globales, EEUU, "movilizará al mundo para trabajar con nosotros, y aseguraremos que otros países cumplen con su parte".
Obama dijo que es la estrategia utilizada al abordar el conflicto con Siria y asegurar un acuerdo histórico con Irán, lo que ha ayudado a prevenir un posible conflicto militar en el volátil Oriente Medio.
Obama también mencionó el histórico acuerdo para luchar contra el cambio climático alcanzado en la conferencia de las partes de la ONU sobre el cambio climático en París a finales del año pasado, la contención de la epidemia del ébola en Africa occidental, y la conclusión del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TTP, siglas en inglés).
"El liderazgo estadounidense del siglo XXI no es una elección entre ignorar al resto del mundo ... u ocupar y reconstruir cualquier sociedad que se esté desintegrando", afirmó.
Liderazgo significa "una aplicación sabia del poderío militar, y movilizar al mundo por las causas correctas", dijo Obama, añadiendo que la fuerza del liderazgo estadounidense depende del poder del ejemplo.