Un tribunal de Shanghai multó hoy lunes a dos plantas de procesamiento de alimentos de un importante proveedor de cadenas de comida rápida y sentenció a diez personas a prisión por producir y vender en 2014 productos alimentarios que no cumplían con los estándares mínimos de calidad.
Las plantas de Shanghai y Hebei de la compañía Husi Food deberán pagar respectivamente 1,2 millones de yuanes (unos 180.000 dólares) en multas por utilizar carne reciclada en la producción. Husi es una filial del procesador mundial de alimentos Grupo OSI, con sede en Estados Unidos.
El gerente del Grupo OSI Yang Liqun, encargado de la división de procesamiento profundo y ciudadano australiano, fue sentenciado a tres años de prisión y recibió una multa de 100.000 yuanes, además de ser deportado posteriormente.
El tribunal también dictó plazos de prisión de entre dos años y ocho meses y 19 meses para otras nueve personas, quienes recibieron multas de entre 80.000 y 30.000 yuanes. Otras cuatro personas fueron sentenciadas a libertad condicional.
El escándalo salió a la luz cuando una estación de televisión informó en julio de 2014 de que Shanghai Husi había suministrado productos contaminados con carne caducada y reprocesada a cadenas de comida rápida y restaurantes de toda China.
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