La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, abogó hoy en la sede de la ONU en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, por el alcance global de la defensa de los derechos humanos.
"Nuestros principios como nación son inamovibles, entre ellos una vocación de paz, de democracia y respeto a los derechos humanos; respeto al derecho internacional y los tratados, soberanía y la obligación de cooperar", dijo la mandataria.
Bachelet expresó lo anterior al intervenir en el debate general del 71 Período de Sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU).
"La promoción y defensa de la democracia y los derechos humanos a nivel internacional, no se oponen al principio de no intervención, de hecho, es una conquista de alcance global en nuestros tiempos", dijo.
La jefa de Estado chilena defendió también las reformas estructurales que emprende su gobierno, pese a las resistencias de la oposición.
"Hablo también desde la experiencia de haber emprendido el camino de los cambios que me demandan los ciudadanos de mi patria", comentó Bachelet.
Complementó que "conozco la dificultad de llevar a cabo los cambios, pero también conozco la esperanza de ver que poco a poco un nuevo horizonte se va haciendo realidad".
Respecto a la situación actual de Chile, Bachelet sostuvo que en las últimas décadas se ha registrado una acelerada modernización en el país sudamericano.
"Chile es un país mediano que aún no alcanza el pleno desarrollo, pero su acelerada modernización de las últimas décadas nos ha puesto de lleno en la frontera de los desafíos de la modernidad y en las tensiones que enfrenta la democracia y el crecimiento económico", dijo.
La mandataria se refirió también al acuerdo de paz entre el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), del cual Chile fue una de las naciones acompañantes.
"Colombia nos ha dado una de las grandes noticias en el año, una esperanza de paz", expresó Bachelet.
Agregó que "Chile, que vivió una difícil transición a la democracia, quiere seguir aportando a su hermano latinoamericano en el manejo del 'post' conflicto, incluyendo observadores militares y policiales en la misión política de Naciones Unidas".