CEPAL: Se espera que la economía mundial crezca en torno al 2,7% en 2017

Actualizado a las 15/12/2016 - 16:43

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SANTIAGO, 14 dic (Xinhua) -- La economía mundial mantuvo la tendencia de bajo crecimiento este 2016, la cual ha venido mostrando en los últimos ocho años, y alcanzó una tasa de expansión del 2,2 por ciento, la más baja desde la crisis financiera internacional del período 2008-2009.

Así lo destaca el Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe de la Comisión de Naciones Unidas para la región (CEPAL), presentado hoy en su sede en Santiago.

"Al igual que en años anteriores, la dinámica del crecimiento fue empujada por las economías en desarrollo, cuya expansión fue del 3,6 por ciento en 2016, mientras que las economías desarrolladas crecieron un 1,5 por ciento", destaca.

Asegura que las proyecciones de crecimiento para 2017 muestran un mayor dinamismo y "se espera que la economía mundial crezca en torno al 2,7 por ciento, como resultado de un mejor desempeño tanto de las economías emergentes como de las desarrolladas".

En ese grupo de las economías emergentes, se espera "un crecimiento del 4,4 por ciento y, tal como en 2016, un desempeño destacado de India, donde el crecimiento previsto para 2017 es de un 7,7 por ciento, mientras que para China se espera un crecimiento cercano al 6,5 por ciento".

Por su parte, Rusia y Brasil pasarán de tasas de crecimiento negativas en 2016 a tasas positivas en 2017.

Para las economías desarrolladas, la CEPAL augura en 2017 un crecimiento promedio del 1,7 por ciento. En este grupo, la economía de EEUU sería la más dinámica, con una tasa de crecimiento esperada del 1,9 por ciento, mientras que la zona del euro presentaría una tasa de crecimiento del 1,7 por ciento.

Por otra parte, el desempeño económico de Japón se aceleraría hasta una tasa del 0,9 por ciento en 2017.

Según el documento, "el volumen de comercio mundial muestra tasas de crecimiento aún menores que las de la economía mundial, ya que en 2016 alcanzaría una expansión del 1,7 por ciento, inferior al 2,3 por ciento registrado en 2015".

"Como resultado de este débil desempeño, en el bienio 2015-2016, el crecimiento del comercio mundial es inferior al crecimiento del PIB mundial por primera vez en 15 años, con la excepción de 2009, período de plena crisis económica y financiera", precisa el texto.

Entre los factores que explican el escaso dinamismo, señala la deprimida demanda agregada mundial y una caída importante de la tasa de inversión, así como un menor crecimiento de las cadenas globales de valor, la llamada "localización" y la menor expansión de la economía de China.

"Para 2017, el repunte esperado de la economía mundial, que se traduciría en una mejora en los factores cíclicos mencionados, permite prever un aumento de la tasa de crecimiento del volumen de comercio mundial, que se ubicaría en un rango entre el 1,8 por ciento y el 3,1 por ciento", asegura el informe de CEPAL.

En cuanto a la dinámica de los precios de las materias primas, un factor muy relevante para las economías de la región de A. Latina, en 2016 se moderó la caída y se esperan mejoras para 2017.

La contracción de los precios de las materias primas que tuvo lugar en 2016 resultó muy inferior a la registrada en 2015 (fue de un 6 por ciento, en comparación con un 29 por ciento en el año anterior).

Los precios de los productos energéticos presentaron las mayores caídas en 2016 (-16 por ciento), seguidos por los de los minerales y metales (-4 por ciento), mientras que los precios de los productos agropecuarios, en promedio, evidenciaron un leve aumento del 3 por ciento.

La CEPAL proyecta para el 2017 una recuperación del 8 por ciento en los precios de los productos básicos en el mundo, liderados por los productos energéticos, que presentarían una alza del 19 por ciento.

Señala que "en el ámbito de los mercados financieros globales, durante 2016 se moderó la volatilidad y sólo se produjeron algunos períodos de alza poco duraderos, al mismo tiempo que los precios de los activos bursátiles se han recuperado".

Sostiene que, "hacia finales de 2016, se observan niveles de volatilidad en los mercados relativamente más bajos que los del punto máximo registrado en enero y los precios de los activos bursátiles han repuntado, en algunos casos considerablemente".

Finalmente, plantea que "en sintonía con las condiciones financieras internacionales más benignas y cambios de los inversores, los flujos de capitales hacia los mercados emergentes se han ido recuperando a lo largo del año, aunque aún permanecen muy por debajo de los niveles observados entre 2010 y 2014".