Las autoridades brasileñas rescataron en 2016 a 660 trabajadores en condiciones de trabajo esclavo, la menor cifra desde el año 2000, cuando se registraron 516 rescates.
Los datos, divulgados hoy por el portal G1 con base en los números del Ministerio de Trabajo, muestran un descenso del 34 por ciento en relación a 2015, cuando se rescató a 1.010 personas en condiciones de trabajo esclavo.
El estado de Minas Gerais (sureste) es donde se encontraron más personas en condiciones de trabajo esclavo, con 141, lo cual representa el 21 por ciento del total en el país.
El número de operaciones realizadas el año pasado para rescatar personas en condición de trabajo esclavo también fue más bajo que en años anteriores, con un total de 108, contra las 189 de 2013, el año con más operaciones.
El total de locales inspeccionados también fue el más bajo, 182, el menor desde 2002.
La cifra se atribuye a la paralización de los auditores fiscales, iniciada en agosto pasado, y por la separación del Ministerio de Trabajo del de Seguridad Social.