Más de 6,2 millones de personas en Somalia enfrentan una aguda inseguridad alimentaria debido a la severa sequía que azota diversas partes del país del Cuerno de África, indicó hoy la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Los hallazgos más recientes de la Unidad de Análisis de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Uasan) administrada por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Red del Sistema de Advertencia Oportuna de Hambruna indican que más de 2,9 millones de personas enfrentaban crisis y emergencia en Somalia hasta junio.
Esto, señala el informe, representa un aumento de más del doble con respecto a las condiciones de hace seis meses. El informe menciona que más de 3,3 millones de personas están clasificadas como en situación acentuada, elevando el número total de personas que enfrentan una aguda inseguridad alimentaria en Somalia a más de 6,2 millones.
"Este último informe nos dice que existe el riesgo de hambruna en varias áreas de Somalia en los próximos meses. La advertencia no podría ser más clara y no podría ser más desoladora", comentó el Representante de la FAO en Somalia, Dick Trenchard, en un comunicado conjunto con el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) durante la presentación del informe en Mogadiscio.
El informe señala que la crisis de alimentos empeora en áreas rurales luego de consecutivas temporadas de escasa lluvia y bajos niveles de agua en los ríos, lo cual llevó a la pérdida casi total de cultivos y redujo las oportunidades de empleo rural, con amplia escasez de agua y pastura, con el consecuente incremento en la muerte de ganado.
El informe indica la acelerada reducción en el acceso a alimentos entre hogares pobres debido a que los precios de alimentos básicos continúan aumentando considerablemente y los precios del ganado bajan significativamente debido a la falta de lluvia.
El documento menciona que los niveles de intensa desnutrición en Somalia se han incrementado desde julio de 2016.
Los resultados de 27 diferentes estudios sobre nutrición realizados entre noviembre y diciembre de 2016 por Uasan y sus socios indican que aproximadamente 363.000 niños menores de cinco años de edad están muy desnutridos, incluyendo 71.000 severamente desnutridos que enfrentan un creciente riesgo de morbilidad y de muerte. El informe establece que esos 363.000 niños con aguda desnutrición necesitan urgentemente tratamiento y apoyo para su nutrición.