El máximo tribunal italiano confirmó hoy la sentencia de 16 años de prisión para el capitán del crucero Costa Concordia que chocó contra un arrecife en enero de 2012 y dejó 32 muertos y cientos de heridos.
Se espera que el capitán, Francesco Schettino, sea encarcelado después de perder la posibilidad de una apelación final pues el Tribunal de Casación, el máximo tribunal penal, confirmó las declaraciones de culpabilidad de tribunales menores y la sentencia de 16 años en un fallo.
Schettino fue acusado de homicidio involuntario y de causar un naufragio cuando conducía el crucero cerca de la isla de Giglio en Toscana. También fue declarado culpable de abandonar el barco volcado cuando aún había cerca de 4.000 pasajeros y tripulantes a bordo.
De acuerdo con medios locales, una de las abogadas que representan a las víctimas, Michelina Suriano, dijo que "finalmente Schettino pagará por lo que hizo".
La tragedia ocurrió el 13 de enero de 2012.