Futuro canciller argentino, con una larga trayectoria diplomática

Actualizado a las 30/05/2017 - 10:43

Palabras clave：

BUENOS AIRES, 29 may (Xinhua) -- El futuro canciller argentino, Jorge Marcelo Faurie, quien asumirá formalmente su cargo el próximo 12 de junio en lugar de Susana Malcorra, tiene una larga trayectoria en el mundo diplomático.

Actualmente, Faurie es el embajador de Argentina en París, Francia, y habla seis idiomas (español, inglés, portugués, francés, italiano y rumano).

El futuro canciller argentino llegará entre martes y miércoles de esta semana a Buenos Aires para iniciar la transición, ya que su asunción formal será el día 12 del próximo mes.

Faurie, de 65 años, ocupará el puesto de Susana Malcorra, quien renunció al cargo por "temas personales", según anunció hoy el presidente de Argentina, Mauricio Macri.

El sucesor de Malcorra es un diplomático de carrera con una larga trayectoria, en la que destacan sus funciones como jefe de protocolo durante el gobierno del ex presidente Carlos Menem, en la década de 1990, y su papel como embajador en Portugal durante 11 años (2002-2013).

Asimismo, fue vicecanciller mientras Carlos Ruckauf era el ministro de Relaciones Exteriores y Culto (2002) durante el gobierno de Eduardo Duhalde.

El embajador es uno de los hombres de confianza de Mauricio Macri, fue uno de los encargados de organizar su ceremonia de asunción, el 10 de diciembre de 2015, donde se desempeñó como jefe de protocolo.

Faurie nació el 24 de diciembre de 1951, es embajador extraordinario y plenipotenciario desde 1998 y será el cuarto diplomático de carrera en llegar al cargo de canciller.

Se graduó como abogado en la Universidad Nacional del Litoral, Santa Fe, en abril de 1974, y egresó del Instituto del Servicio Exterior de la Nación de Buenos Aires, en 1976.

Asimismo, ocupó cargos diplomáticos en representaciones argentinas en Chile, Brasil, Rumania, Trinidad y Tobago, Jamaica y Venezuela.

En enero de 2016, bajo el decreto 269 del actual presidente de Argentina, Mauricio Macri, fue designado como embajador argentino en Francia.

Un mes más tarde, tuvo un papel importante en la visita a Buenos Aires del presidente francés, Francois Hollande, la primera de un mandatario galo desde la llegada de Jacques Chirac en 1997.

En julio del mismo año, Macri retribuyó la gentileza del gobernante francés al visitar a su par europeo en el Palacio Elíseo de París, con Faurie como organizador del encuentro.