BEIJING, 8 jun (Xinhua) -- China se convirtió en 2016 en el segundo país con mayor inversión directa en el extranjero, según informe hecho público hoy jueves por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, en sus siglas en inglés) y la Academia China de Comercio Internacional y Cooperación Económica, dependiente del Ministerio de Comercio.
Los flujos de inversión directa china en el extranjero aumentaron un 44 por ciento interanual el año pasado hasta 183.000 millones de dólares, impulsados por un alza en las fusiones internacionales y las adquisiciones por parte de empresas chinas, según el Informe sobre las inversiones en el mundo de 2017.
Estados Unidos volvió a ser el mayor inversor global y los Países Bajos se situaron en tercera posición.
Los flujos de inversión directa de China al exterior fueron superiores en un 36 por ciento a los recibidos de fuera, según el estudio.
El país fue de nuevo el mayor inversor en los países menos desarrollados, muy por delante de Francia y Estados Unidos.
Pese al 15 por ciento interanual de descenso en los flujos hacia las economías asiáticas en desarrollo, China repitió como tercer mayor receptor de inversión foránea directa del mundo en 2016, detrás de Estados Unidos y el Reino Unido, aunque estos flujos decayeron un uno por ciento interanual, a 134.000 millones de dólares.
El director de la sección de inversión y empresas de la UNCTAD, James Zhan, señaló que las inversión de China en el exterior seguirá siendo alta visto el impulso del país al desarrollo de la Franja y la Ruta y la cooperación en materia de capacidad industrial internacional.
La inversión fuera de sus frontera debe, no obstante, elevar su calidad ante los muchos retos que presenta el proteccionismo, advirtió Zhan.
En términos globales, los flujos de inversión directa en el extranjero se redujeron un dos por ciento el año pasado hasta 1,75 billones de dólares, según el informe.
El trabajo prevé que la recuperación de los flujos globales de inversión directa sea modesta en 2017 y se sitúe en 1,8 billones de dólares, un cinco por ciento más que el ejercicio previo.