Beijing,04/07/2017(El Pueblo en Línea)-Para las personas interesadas en el cohete portador chino Long March-5 y la industria espacial en general, el 2 de julio era un día especial. Por desgracia, durante el despegue del cohete se produjo una anomalía por lo que el lanzamiento no tuvo éxito.
El segundo lanzamiento del cohete portador Long March-5 era una prueba. El lanzamiento fallido podría retrasar la comisión del Long-March-5 en el sistema de transporte espacial de China.
Los retrasos y fracasos no son raros en la historia de los vuelos espaciales tripulados, pero los sueños de volar fuera de la atmósfera nunca se detuvieron a causa de ellos.
El verdadero valor y la sabiduría se demuestran en la forma en que la gente se ocupa de las misiones sin éxito o incluso los fracasos. El fracaso es molesto, pero también ayuda a las personas a adquirir experiencia. A veces, el fracaso es más importante que el éxito: esta es la experiencia de Qian Xuesen, el padre del programa espacial de China.
Los ingenieros aeroespaciales chinos nunca han tenido miedo a los fracasos, ni han perdido la confianza durante seis décadas. Los hechos demuestran que el equipo es honorable.
"El tiempo no pasará en vano. Esta noche quedará grabada en el registro histórico de la industria aeroespacial de China", dijo un periodista cuando vio la expresión tranquila en la cara de Long Lehao, un eminente científico de cohetes, después de que el lanzamiento fracasara en la noche del 2 de julio.
(Web editor: Felipe Chen, Rocío Huang)