Una ambiciosa agenda marca la Cumbre del G20 en Hamburgo

Pueblo en Línea  2017:07:05.15:06

Por Fraser Cameron

Hamburgo, 05/07/2017 (El Pueblo en Línea) - La Cumbre del G20 en Hamburgo, Alemania, tiene lugar dentro de una situación mundial cambiante. Para la canciller Angela Merkel, anfitriona de la magna cita, hay tres preguntas claves: ¿Cómo puede Alemania asegurar que los socios del G20 continúen promoviendo el libre comercio y rechazando el proteccionismo? ¿Cómo salvar el acuerdo climático de París? ¿Cómo fortalecer las instituciones multilaterales y vencer la tendencia antiglobalización?

Son tareas hercúleas que van más allá del poder de un presidente pro témpore del G20. Después de las visitas del presidente estadounidense Donald Trump a la Unión Europea y la sede de la OTAN en Bruselas y Sicilia (para asistir a la cumbre del G7), Merkel sorprendió al cuestionar si Europa todavía podía confiar en Estados Unidos. Y añadió que Europa tiene que hacer más por su propia seguridad, debido a la ambivalencia actual de Trump en la OTAN, el rechazo del acuerdo de París y su política comercial "EE.UU primero". Otros líderes europeos, con excepción de la primera ministra británica, apoyaron a Merkel. Aunque la mayoría de los países del G20 estén buscando sus propios acuerdos comerciales bilaterales con Estados Unidos y es poco probable que haya una situación tipo 19-1 en la Cumbre del G20 que comenzará este viernes en Hamburgo, Alemania.

A pesar del camino recorrido, Merkel tratará de convencer a Estados Unidos de regesar al acuerdo de París, tarea en la que debe contar con el apoyo de la mayoría de los miembros del G20. Aunque sin garantías de éxito, Merkel tiene que hacer el esfuerzo, sobre todo porque el cambio climático es una prioridad para los votantes alemanes y Alemania ya está lista para acudir a las urnas en septiembre. Merkel también buscará un acuerdo para fortalecer las instituciones multilaterales, aunque nuevamente esta aspiración puede chocar con la oposición del presidente Trump.

En las reuniones preparatorias de la Cumbre, los Estados Unidos se negaron a aceptar cualquier redacción que apoyara el libre comercio o combatiera el proteccionismo, actitud que refleja las disputas internas que existen en la administración Trump sobre el futuro derrotero de la política comercial de su país. Trump ya retiró a los Estados Unidos de la Asociación Trans-Pacífico y también anunció que aspira a renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Tampoco se conocen las perspectivas de un acuerdo comercial transatlántico. Y dado el estancamiento del comercio internacional, es poco probable que existan acuerdo sobre el fortalecimiento de la Organización Mundial del Comercio u otros organismos relacionados.

Las cuestiones sobre seguridad regional, migración y refugiados, la pobreza, el hambre y las epidemias se incluirán en la agenda de esta Cumbre del G20. Berlín también tratará de reducir la probabilidad y el impacto negativo de posibles crisis mediatas, a través de una cooperación orientada hacia el futuro. En opinión de Merkel, y apoyada por la Unión Europea, nunca ha sido más imperiosa la necesidad de una cooperación internacional que configure la creciente conectividad global para beneficio de todos.

Como presidente pro témpore del G20, Alemania presionará a otros miembros para que apliquen reformas estructurales y políticas macroeconómicas orientadas a ganar en estabilidad y capacidad de recuperación de las economías individuales. Alemania nunca ha sido partidaria del préstamo o de permitir que las deudas nacionales se salgan de control. En ese aspecto, podría enfrentar la oposición de Japón, así como de algunos miembros de la Unión Europea como Francia e Italia. Además, Berlín seguirá promoviendo la cooperación en cuestiones financieras y fiscales, empleo, comercio e inversión. La Cumbre del G20 en Hamburgo también revisará las numerosas promesas acordadas en la pasada cita de Hangzhou, incluida la lucha contra la corrupción y la guerra al lavado de dinero.

Dado que Alemania quiere que el G20 acepte abordar la problemática de la migración y los flujos de refugiados como una responsabilidad compartida, Merkel puede enfatizar la necesidad de un compromiso más fuerte que ponga fin al conflicto en Siria y nuevos enfoques para asegurar el desarrollo económico sostenible de África. Esto podrá estar vinculado a los respectivos análisis sobre agricultura, abastecimiento de agua, energía, salud y seguridad alimentaria.

Al igual que China lo hizo el pasado año, se espera que Alemania organice una eficiente Cumbre del G20. Aunque, hasta las reuniones mejor preparadas pueden ser secuestradas por emergencias repentinas. Por ello es por lo que lo arreglado, además de eficiente, debe ser flexible.

Si Merkel puede lograr incluso la mitad de su ambiciosa agenda, entonces la Cumbre del G20 en Hamburgo podrá ser definida como un éxito.

El autor es director del Centro UE-Asia de Bruselas.