WASHINGTON, 29 sep (Xinhua) -- Estados Unidos ordenó hoy la salida de más de la mitad de su personal en la embajada estadounidense en la capital de Cuba, La Habana, y advirtió no viajar al país caribeño, después de los misteriosos incidentes que ocasionaron problemas de salud a diplomáticos estadounidenses.
La embajada de Estados Unidos en La Habana seguirá operando con un personal reducido. Los trámites de emisión de visas se suspenderán indefinidamente, informaron medios estadounidenses.
La acción tuvo lugar después de que las autoridades de Estados Unidos confirmaron el mes pasado que por lo menos 21 estadounidenses que trabajaban en la embajada en La Habana sufrieron afectaciones físicas.
No se dieron detalles de las lesiones, pero reportes de prensa señalaron que los estadounidenses afectados sufrieron pérdida de audición severa y por lo menos una de las víctima presentó cierto "daño cerebral".
La acción asestará un golpe a las delicadas relaciones entre Estados Unidos y Cuba, ex rivales en la Guerra Fría. Los dos países reanudaron sus relaciones diplomáticas en julio de 2015, más de cinco décadas después de haberlas roto.
El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, se reunió el martes con el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, para discutir los incidentes. El encuentro fue el primer contacto diplomático de alto nivel entre representantes de los dos países desde que Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos en enero.
La portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Heather Nauert, indicó que los dos altos diplomáticos tuvieron una discusión "firme y franca" acerca de las preocupaciones estadounidenses sobre sus empleados.
"El secretario trasmitió la gravedad de la situación y subrayó las obligaciones de las autoridades cubanas de proteger al personal de la embajada y sus familias bajo la Convención de Viena", indicó Nauert.
Estados Unidos expulsó dos diplomáticos cubanos a finales de mayo a causa de estos incidentes. Cuba indicó que estaba investigando los hechos.
"Cuba nunca ha permitido ni permitirá que el territorio cubano sea utilizado para cualquier acción contra agentes diplomáticos acreditados o sus familias", dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.