PANAMA, 15 oct (Xinhua) -- La participación estudiantil, con cuatro equipos, destacó en la VI edición de la regata de botes-dragón celebrada este domingo en Panamá a la usanza de la milenaria competencia china.
Fermín Tomás Chan, presidente del Centro Cultural Chino Panameño y del comité organizador, destacó el esfuerzo hecho por los representantes del Colegio Javier, el Colegio St. George y dos equipos del Instituto Sun Yat-Sen como una manera de seguir popularizando este deporte.
Catorce equipos compitieron en esta edición, cada uno integrado por 10 remeros, un timonel y otro tripulante que toca el tambor y que lleva el ritmo de la carrera, la cual arranca en el momento en el que se le pintan los ojos a estos tradicionales botes chinos con forma de dragón.
Junto a la regata, celebrada en el río Chagres, cerca del Canal de Panamá, hubo además venta de comida, juegos para niños y espectáculos.
El presidente del comité organizador subrayó que la prueba demuestra la importancia de la presencia china en Panamá, que se remonta a más de 160 años, y dijo que más de la mitad de los participantes no tienen ascendencia china.
Liu Bo, encargado de negocios de la embajada de China en Panamá, consideró por su parte muy importante el certamen para la promoción de la cultura china y como una gran muestra de la presencia de la comunidad china en Panamá.
El diplomático explicó que la participación en la regata de un bote en nombre de la Embajada china también simboliza las relaciones diplomáticas establecidas en junio pasado entre Panamá y China.
Reiteró que la cultura es importante para la cooperación entre ambos países, como hiciera en su reciente visita a Panamá el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi. Sin duda va a haber una mayor cooperación entre China y Panamá, agregó.
La regata de botes-dragón es un deporte milenario chino con reconocimiento y trayectoria internacional y es el deporte acuático de mayor crecimiento a nivel mundial.
Hace aproximadamente tres años, el Centro Cultural Chino Panameño tomó la decisión de llevarlo a Panamá para celebrar una de las principales fiestas culturales chinas.
El festival se celebra en honor a Qu Yuan, respetado poeta del período de los Reinos Combatientes que se suicidó en el río Miluo, en el centro de China. Según cuenta la leyenda, para mantener a los peces y malos espíritus alejados de su cadáver los pescadores se echaron al agua en sus largos botes golpeando tambores.
En Panamá se celebran la mayoría de las festividades chinas, ya que entre el cinco y el seis por ciento de sus alrededor de 3,5 millones de habitantes tienen origen chino.