Estudiantes de Djibouti se familairizan con la cultura del hutong durante un curso en la Academia China de Gobernanza. (Foto: Zou Hong)
Desde el año pasado, a petición de los participantes se han impartido otras charlas.
"Algunos alumnos quieren aprender más sobre la reducción de la pobreza, por lo que hemos añadido una charla sobre ese tema," añade Liu Gang.
Jacobo Domínguez Gudini, consultor mexicano de la Organización de los Estados Americanos (OEA), le interesa aprender más acerca de las medidas de China y los sistemas para erradicar la corrupción.
"Será útil para los países latinoamericanos, donde la lucha contra la corrupción es tan difícil," admite Domínguez.
Liu Gang recuerda que en el pasado los funcionarios chinos eran enviados a los países desarrollados para aprender acerca de las experiencias locales, y era muy raro que funcionarios de países desarrollados participaran de cursos en China.
La situación empezó a cambiar en octubre del 2011, cuando un grupo de funcionarios públicos de Francia, incluidos responsables políticos de alto nivel y efes provinciales, participaron en el programa de la Academia China de Gobernanza.
El interés llegó en un momento en que muchos países desarrollados estaban experimentando un crecimiento más lento, sin embargo la economía de China sigue avanzando bien.
“Los funcionarios están interesados en saber cómo China lo está logrando”, precisa Liu Gang. "Para ellos, el camino del desarrollo con características chinas comenzó a merecer atención y resultaba tan valioso como las experiencias de los propios países desarrollados".
Desde el 2012, los cursos de la Academia China de Gobernanza han atraído a funcionarios de la Unión Europea, Italia, Australia y Nueva Zelanda.
En diciembre del 2010, Shao Wenhai, exjefe del Centro de Formación de la Academia China de Gobernanza acompañó al presidente Xi Jinping, vicepresidente de China en aquel momento, quien participó en una clase diseñada para ayudar a los funcionarios públicos de países en desarrollo a reaccionar mejor frente a los desastres naturales.
Xi expresó a los estudiantes que se había reunido con los dirigentes de varios países en desarrollo, y que ellos tenían esperanzas de que varios de sus funcionarios fueran entrenados en China. Como resultado, Xi alentó a la academia para organizar más programas de capacitación para funcionarios de países en desarrollo y desarrollados para que ambos pudieran obtener una mejor comprensión sobre China.
Para la mayoría de los funcionarios seleccionados el curso que les ofrece la Academia China de Gobernanza es su primer viaje a China. La cultura tradicional china es una de las clases más populares y que ayuda a una mejor comprensión de las actitudes del pueblo chino y sus valores fundamentales.
"La mayoría quiere aprender acerca de la diversidad cultural del país, el desarrollo de China y los beneficios de la cooperación con China. Ahora, en la Academia China de Gobernanza estamos más seguros sobre la manera de eneñar nuestro camino de desarrollo, valor que ha ayudado a China a fortalecerse", añadió.
Texious Masoamphambe, juez principal de la judicatura en Malawi aseguró: "Los logros de China han permitido a los países africanos vislumbrar nuevas posibilidades en nuestro propio desarrollo, y es por eso que estamos deseosos de aprender más sobre China."
Además de ayudar a los funcionarios extranjeros a familiarizarse con la realidad de los sistemas políticos y sociales chinos, el programa apunta a aclarar conceptos, como, por ejemplo, si China es o no un país en desarrollo y si llegará a buscar la hegemonía mundial una vez logre un poder determinado.
“Muchos de esos malentendidos son el resultado de una falta de comprensión de la naturaleza de China y de engañosas campañas de los medios de comunicación occidentales”, fustigó Shao.