Un policía con el corazón de oro protege un campus universitario en Wuhan

Pueblo en Línea  2018:03:02.14:06

En el campus de la Universidad Centromeridional de Nacionalidades de Wuhan, el policía Xia Qingliang comparte con dos estudiantes provenientes de la Región Autónoma de Xinjiang Uygur. (Foto: proporcionada）

Por Liu Kun y Zhang Yi

Wuhan,02/03/2018(El Pueblo en Línea)-Xia Qingliang es el único policía que trabaja dentro de la Universidad Centromeridional de Nacionalidades de Wuhan, institución que cuenta con 26.000 alumnos. Del total, un 60 por ciento pertenecen a grupos étnicos minoritarios. A pesar de ello, Xia asegura que él mantiene una fuerte presencia en todo el campus y que los maestros y estudiantes siempre saben donde encontrarle.

Los profesores de la Universidad Centromeridional de Nacionalidades de Wuhan aseguran que,debido a su extraordinaria diligencia y amabilidad, a este oficial de 58 años los estudiantes lo respetan como a un padre.

Desde el 2001, fecha en que comenzó a trabajar en la universidad, Xia ha logrado ayudar a muchos estudiantes, ya sea resolviendo sus problemas o proporcionándoles ayuda financiera de su propio bolsillo.

El año pasado, una estudiante de etnia tibetana fue estafada después de realizar un trabajo para falsear las cifras de ventas de una tienda en línea que necesitaba aumentar su reputación. Ella tuvo que utilizar su propio dinero para comprar mercancías, bajo la promesa de que el dueño le reembolsaría ese gastoy le pagaría intereses.

Ella cumplió lo acordado, pero el dueño de la tienda se negó a reembolsarle.

Insolvente e incapaz de concentrarse en sus estudios, la joven tibetana informó a su maestro y éste habló con Xia. El policía inició una investigación, recuperó el dinerode la estudiante y le brindó apoyo emocional e información sobre cómo evitar futuros fraudes.

En los últimos 17 años, Xia también ha utilizado parte de su sueldo para ayudar a que terminen la universidad 26 estudiantes de familias pobres.

Wang Tao, de la etnia Miao, conoció por primera vez a Xia en el invierno del 2008. A pesar del frío, el policía notó que no estaba abrigado y vestía pantalones cortos.

Xia le compró ropa interior térmica y un abrigo. Además, le regaló 200 renminbi (30 dólares),una mensualidad que le entregó hasta que el joven terminó la universidad.

En agosto del 2012, el agradecido Wang visitó a Xia y le entregó su primer sueldo y una bolsa con regalos.

"Él obtuvo siempre buenas notas. Debería haber continuado el postgrado", afirma Xia. "Pero eligió comenzar a trabajar para ayudar a su familia, que es pobre."

Xia siempre le aclara a los estudiantes que el dinero que entrega es un "préstamo" para inspirarlos a estudiar con ahínco. Y que si ellos pueden, se lo devolverán algún día.

"Cada vez que él entrega dinero a los estudiante, me lo informa", asegura Tang Zhuying, esposa de Xia. "No somos una familia adinerada, pero tenemos mejor situación que mucho de los estudiantes que mi esposo ha traído a casa."

Xia confiesa que su solidaridad con los estudiantes de bajos ingresos es una forma de compensar la amabilidad y el apoyo recibido cuando niño. La familia de Xia no podía ofrecerle ni siquiera un cuenco de arroz diario, recuerda el policía. Sin embargo, él recibió ayuda de muchos aldeanos.

En 2016, cuando Xia cumplió 55 años, sus superiores decidieron trasladarlo a una posición más cómoda. Para sorpresa de muchos, los estudiantes pidieron el regreso de Xia.

Debido a la cantidad de peticiones en línea, Xia regresó para seguir protegiendo, con su corazón de oro,el campus de la Universidad Centromeridional de Nacionalidades de Wuhan.