NACIONES UNIDAS, 21 mar (Xinhua) -- El Consejo de Seguridad resaltó hoy la importancia de unificar las fuerzas armadas de Libia bajo supervisión civil y enfatizó que no puede haber solución militar para la crisis.
Los miembros del Consejo de Seguridad consideran que el Acuerdo Político Libio de diciembre de 2015 sigue siendo el único marco viable para poner fin a la crisis política libia antes de la celebración de elecciones y para finalizar la transición política.
Los comentarios fueron hechos por Lise Gregoire-van Haaren, representante permanente adjunta de Holanda ante la ONU. Holanda es el presidente rotativo del Consejo de Seguridad en marzo.
Los miembros del consejo exhortaron a los líderes libios a entablar un diálogo constructivo con un espíritu de compromiso, dijo la representante después de una consulta a puertas cerradas.
El Consejo de Seguridad condenó la constante violencia y resaltó que deben rendir cuentas los responsables de violaciones del derecho internacional humanitario y de abusos de derechos humanos, incluyendo contra los migrantes.
El Consejo de Seguridad también escuchó hoy el informe de Ghassan Salame, representante especial del secretario general de la ONU en Libia.
Salame enfatizó la importancia de fortalecer las instituciones de Libia a través de elecciones.
"La ONU considera una de sus mayores prioridades antes de que acabe el año la realización de elecciones justas, libres y creíbles", dijo Salame en videoconferencia desde Trípoli, capital de Libia.
La prevalencia de los actos de violencia sigue siendo causa de preocupación dijo el representante especial.
Los grupos extremistas, incluyendo el Estado Islámico y Al Qaeda, siguen manteniendo presencia en Libia y han realizado ataques de forma reciente. Los grupos armados, incluyendo los integrados en la estructura estatal, siguen operando al margen de la ley y cometen abusos de los derechos humanos.
Salame, también jefe de la Misión de Apoyo de la ONU en Libia, enfatizó la importancia del desarme en el país. "Muchos jóvenes se ganan la vida portando armas y deben ser reintegrados en la vida civil".
El representante especial dijo que en mayo se presentará una estrategia de desarme. "Sin embargo, debemos ser realistas. En un país inundado de armas, el desarme tardará y necesitará instituciones nacionales más fuertes", advirtió.
Saleme pidió al Consejo de Seguridad "ejercer su máxima influencia" para contener los flujos de nuevas armas hacia Libia.
Después de que la revolución de 2011 depuso a Muammar Gaddafi, Libia se sumió en una nueva guerra civil entre facciones militares, milicias y pequeños grupos armados. El país aún tiene que reunificarse.
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