A la izquierda: Los médicos supervisan el estado de los miembros de la tripulación del vuelo desviado, que están recibiendo tratamiento en una cámara de oxígeno hiperbárico en el Hospital del Pueblo No. 1 de Chengdu. A la derecha: Liu Chuanjian, capitán del vuelo, camino a recibir un tratamiento con oxígeno. 15 de mayo del 2018. [Foto: Wang Huan]
Por Huang Zhiling y Luo Wangshu
Chengdu, Sichuan, 16/05/2018(El Pueblo en Línea) - Un grupo de investigación creado por la Administración de Aviación Civil de China ha llegado a Chengdu, provincia de Sichuan, para investigar las razones que provocaron que estalló en pleno vuelo el parabrisas delantero de un Airbus A319, informó este martes Tang Weibin, jefe de la oficina de seguridad de la Administración de Aviación Civil de China.
El cristal delantero de las aeronaves está hecho de varias capas de materiales muy resistentes y es extremadamente difícil de romper. Además, una investigación preliminar afirmó que el parabrisas que explotó no tenía un historial de problemas o reparaciones.
El vuelo 3U8633 de Sichuan Airlines despegó según lo programado desde el aeropuerto internacional Jiangbei de Chongqing a las 6:26 am con destino a Lhasa, capital de la región autónoma del Tíbet. Su llegada estaba prevista para las 9:05 am.
Pero a los 100 kilómetros de vuelo, a las 7 de la mañana, el parabrisas de la cabina estalló y un copiloto por poco sale despedido del avión. La aeronave, que se desplazaba entre 800 y 900 kilómetros por hora, súbitamente perdió altitud durante cinco o seis segundos.
El capitán Liu Chuanjian declaró que "todo en la cabina se hizo liviano y comenzó a flotar en aire. La mayor parte de los equipos se averiaron".
"No pude escuchar la radio", explicó Liu. "La aeronave temblaba tan fuerte que no podía leer los medidores."
A pesar de los obstáculos, unos 45 minutos después del incidente Liu fue capaz de hacer un aterrizaje de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Shuangliu de Chengdu, salvando la vida de los 119 pasajeros y los 9 tripulantes a bordo.
Este lunes, las autoridades del suroeste responsables de la aviación china enviaron mensajes urgentes a las compañías de aviación y unidades de mantenimiento, informándoles de lo sucedido y pidiendo que redoblen esfuerzos para prevenir accidentes similares. Y se indicó que mantengan un alto rigor en el chequeo de las aeronaves, especialmente de las piezas relacionadas con los parabrisas y ventanas cuyos desperfectos pudieran albergar peligros ocultos.
"Mis colegas y yo nos quedamos muy sorprendidos al conocer este accidente. No sabemos por qué ocurrió. Después de cada vuelo, comprobamos el parabrisas para encontrar alguna grieta o alguna capa de cristal que se haya separado de la otra", aseguró Zhang Yi, especialista de mantenimiento de aviones que trabaja en el Aeropuerto Internacional Shuangliu de Chengdu desde 1990.
"Si detectamos algún problema, sustituimos el parabrisas", afirmó.
Wang Yanan, editor jefe de la “Revista Aeroespacial”, considera que el defecto podría ser de fábrica o debido a irregularidades en la instalación del parabrisas.
“La instalación de un parabrisas requiere el uso de sujetadores metálicos. Si en el montaje sucedió algo anormal donde el parabrisas y las partes metálicas se conectan, esto podría dañar todo el parabrisas”, indicó Wang.
(Web editor: Rosa Liu, Rocío Huang)