Madre e hija en una foto publicada en Weibo.
Beijing, 29/05/2018 (El Pueblo en Línea) - El 4 de mayo, Wang Fengya, de tres años de edad, residente en Taikang, provincia de Henan, murió de retinoblastoma, un tipo de cáncer que ataca los ojos y que padecen principalmente los niños menores de dos años.
De familia demasiado pobre para abonar los onerosos gastos médicos, su madre Yang Meiqin comenzó a recaudar donaciones a través de la plataforma Shuidichou. La primera ronda fue en noviembre de 2017 y la segunda en marzo de 2018, precisó Red Start News, un medio digital del Chengdu Economic Daily News.
Con la esperanza de recaudar más dinero, Yang Meiqin también publicó un vídeo en Huoshan, sitio chino de vídeos cortos.
"Por favor, ayúdame", susurraba la niña en el audiovisual.
Sin embargo, después de verificarse la recaudación de fondos algunos internautas dudaban que Yang utilizara esa dinero en mejorar la salud de su hija y especularon que ella lo había invertido en corregir un defecto de su hijo varón.
¿Adónde fueron a parar las donaciones?
La gente descubrió que Yang tenía otras tres hijas y un hijo que padecía de paladar hundido.
El 4 de mayo, antes que esta información saliera a flote, la niña falleció. Su muerte enojó aún más a los iracundos cibernautas. Entonces, muchos comenzaron a pensar que la niña recibió un tratamiento normal, sin pagar ningún tipo de quimioterapia o cirugía.
¿Eso significa que la familia dejó de tratarle un tumor que tiene una tasa de supervivencia de más del 94 por ciento?
Algunas personas sugirieron incluso que la familia había abusado de la amabilidad de los donantes. En los días posteriores a la desaparición física de la pequeña, se hicieron más fuertes las voces que exigieron una mejor supervisión de las donaciones entregadas a causas humanitarias.
"Vamos a exigirle a esta familia que detalle el tratamiento médico y los gastos de la pequeña", precisó el 24 de mayo el oficial Zhang Leiluo, jefe del departamento de relaciones públicas de la oficina de seguridad pública del condado Taikang, Zhoukou. "Ahora solamente podemos conocer algunos de los costos del tratamiento médico basado en los registros del hospital."
Pasadas 24 horas de la declaración de Zhang, la plataforma Shuidichou publicó un comunicado explicando que estaba colaborando con la policía para averiguar cuánto dinero se utilizó realmente en el tratamiento de la niña y si hubo malversación.
La familia había logrado reunir 39,638 renminbi ( 6,224 dólares), incluyendo 35,689 renminbi donados a través de una plataforma de recaudación de fondos y 2,949 renminbi recibidos desde la red social WeChat, así como de algunas plataformas de vídeo en vivo, explicó la policía local al Red Start News.
Sin embargo, de acuerdo a fuentes no confirmadas, una publicación en la red social Weibo aseguró que la familia había reunido más de 150.000 renminbi (unos 23,480 dólares).
Las controversias y debates han terminado en disculpas por parte de los internautas, sin embargo la familia afirma que demandará al culpable de propagar el enemigo rumor.
"Mi nuera ha tenido miedo de encender su teléfono celular durante días", expresó la abuela de la niña al Legal Paper.
Todo el debate ha provocado reflexiones sobre la función y madurez de la opinión pública en las redes sociales chinas.
"Sólo un sistema transparente de ayuda puede realmente beneficiar a los que realmente lo necesitan", afirmó el cibernauta Hongmei Xuezhong.
"Aunque los blogeros y los medios de comunicación han borrado sus publicaciones sobre el tema, ¿quién va a responder por este crimen?", se pregunta otro cibernauta apodado Lantian.
“Es fácil concluir basándose en fragmentos de información, pero cuando se trata de cuestiones de peso como este caso, la ciudadanía debería ser más prudente a la hora de emitir sus juicios, al menos que tenga una sólida evidencia en sus manos. Sin pruebas irrefutables, es muy fácil "hacerles daño a personas inocentes y a sus familiares", aseguró un periodista de noticias de CCTV.
(Web editor: Rosa Liu, Rocío Huang)