ASUNCION, 18 jun (Xhinua) -- Ante la demora de la concreción del acuerdo con la Unión Europea, el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, planteó este lunes retomar la relación con China, durante la cumbre del Mercosur realizada en Paraguay.
El nuevo presidente pro tempore del bloque enfatizó la necesidad de insertarse más y mejor en el mundo y de abrir las puertas a nuevas oportunidades.
Señaló que esa realidad indica que China es el principal socio comercial del Mercosur, y aunque se puede prescindir de ese socio, ya que existen factores limitantes al respecto, consideró que de un tiempo a esta parte ya se volvió largo y costoso sostener la disfuncionalidad existente en la relación con el país asiático.
"¿Qué esperamos para relanzar el mecanismo de diálogo entre el Mercosur y China?, que si mal no recuerdo, la última reunión de dicho mecanismo se realizó en septiembre de 2004, hace casi 14 años", expresó.
Recordó que en noviembre de 2012, en el marco de una misión promocional del Mercosur en Shanghai, se realizó una reunión de representantes gubernamentales que más allá de lo protocolar no tuvo objetivos ni resultados concretos.
Indicó que es casi el mismo tiempo que se lleva negociando con la UE, y que ambas demoras preocupan por igual al gobierno de Uruguay.
"Modestamente pedimos de proceder entonces y si por alguna razón alguno de nosotros no puede avanzar en este aspecto, también dialoguemos entre nosotros y encontremos fórmulas que sin lesionar al Mercosur, contemple a sus estados partes porque la integración no es una jaula ni tiene porque serlo", señaló.
Lamentó que todavía no se haya cerrado el acuerdo con la Unión Europea, ya que el Mercosur trabaja para que el resultado sea el mejor pero no todo depende del Mercosur, enfatizó.
En tal sentido, reiteró lo expresado en el anterior encuentro de diciembre de 2017 en Brasil, recalcando que "no estamos dispuestos a perder el tiempo en negociaciones eternas, precisamos de capacidad técnica pero acompañada de voluntad política real, como ha quedado demostrado en las negociaciones entre la Unión Europea y Japón, que tardaron aproximadamente un año", puntualizó.
Invitó a sus pares a comparar el tiempo de negociación de ambos acuerdos.
"Tampoco estamos dispuestos a firmar un acuerdito, no es una amenaza ni un delirio, es simplemente dignidad y responsabilidad", agregó.
Remarcó que el Mercosur debe actuar con responsabilidad, buscar caminos de encuentro a través del diálogo y trabajar positivamente por el bien de los pueblos.