BEIJING, 18 ago (Xinhua) -- La economía de China ha mantenido un crecimiento estable y una buena dinámica, pese al complicado entorno interno y externo, dijo Ning Jizhe, subdirector de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma y también jefe del Buró Nacional de Estadísticas.
"Basándose en los indicadores clave que miden la macroeconomía, la economía de China presenta una característica distintiva de estabilidad", señaló Ning, que apuntó que China tiene confianza y capacidad para vencer las dificultades y obstáculos en su tarea de lograr sus metas anuales para el desarrollo económico y social.
El crecimiento económico chino ha permanecido entre el 6,7 y el 6,9 por ciento en 12 trimestres consecutivos, destacó Ning. En la primera mitad de 2018, la cifra se situó en el 6,8 por ciento.
En los siete primeros meses la tasa de desempleo calculada mediante encuesta del país fue del 5,1 por ciento, estable en torno al 5 por ciento. Al mismo tiempo, su inflación al consumidor subió moderadamente un 2 por ciento y los precios al productor crecieron un 4 por ciento.
Entre enero y julio China registró un superávit por cuenta corriente. Sus reservas de divisas también fueron en ascenso, recordó Ning.
Se han obtenido progresos en la reforma estructural por el lado de la oferta, se han controlado riesgos financieros potenciales y se ha avanzado en el alivio de la pobreza y el control de la contaminación.
China continuó abriéndose al exterior facilitando el acceso al mercado. Durante este periodo las importaciones y exportaciones siguieron expandiéndose y la inversión extranjera directa aumentó en gran medida en comparación con el año pasado.
El crecimiento de los servicios continuó superando al de la industria secundaria. El sector de los servicios modernos presentó un ritmo más rápido, con crecimientos interanuales de más del 30 por ciento en las actividades de intercambio de información, el software y la tecnología informática.
No obstante, el aumento del unilateralismo, el proteccionismo comercial y en inversión y las fricciones comerciales internacionales, junto con las contradicciones estructurales dentro del país, así como el desarrollo desequilibrado e inadecuado, podrían lastrar el crecimiento de China, avisó Ning.
En la segunda mitad del año hay que hacer esfuerzos para mantener estables el empleo, el sector financiero, el comercio exterior, las inversiones extranjera y nacional y las expectativas.
Pese a las fluctuaciones en la inversión y el consumo, los fundamentos positivos de la economía china permanecen sin cambios, dijo Ning, que citó ventajas como la bonificación de talentos, el capital abundante, la oferta de terrenos y las crecientes ventajas en ciencia y tecnología.
"Tenemos suficiente margen para el desarrollo económico", destacó Ning, que afirmó que hay un gran potencial del mercado, un grupo de población de ingresos medios que está en expansión y el suficiente potencial en la demanda nacional.
"China ha acumulado ricas experiencias haciendo frente a diversos tipos de crisis tras 40 años de reforma y apertura, lo que ha fortalecido la confianza de China en el futuro de su economía", manifestó Ning.