Li Kaifu (a la derecha) en Beijing, 14 de agosto del 2018. (Foto: Miao Wanyi/ Pueblo en Línea)
Beijing, 23/08/2018 (El Pueblo en Línea) - Los discursos más divergentes sobre el futuro de la inteligencia artificial concluyen que "destruirá a los humanos" o "ayudará a los humanos a llevar una vida mejor".
Este criterio es expresado por el robot humanoide Sophia.
Como el primer ciudadano robot del mundo (es ciudadano de Arabia Saudita), por ahora Sophia no puede ser responsabilizada por ninguna de sus "opiniones". Sin embargo, su existencia ha generado discusiones sobre temas éticos que rodean a la inteligencia artificial. Sobre todo en un momento en que la mayoría se pregunta si la inteligencia artificial conducirá a una nueva revolución industrial y a la pérdida generalizada de empleos.
Li Kaifu, experto en inteligencia artificial y exitoso empresario de Taiwán, expresó sus perspicaces pensamientos sobre la actual agitación acerca de la inteligencia artificial y el futuro de la humanidad.
En la fiesta de intercambio de libros de Beijing, celebrada el 14 de agosto, Li compartió una anécdota que le inspiró a luchar contra el linfoma, un tipo de cáncer que casi le arrebata la vida.
Un amigo suyo construyó un producto que ayudó a las personas mayores a sobrellevar la vida diaria como ordenar la comida, sintonizar la televisión, llamar a los médicos, entre otras operaciones. Sin embargo, la categoría que tuvo más uso durante las pruebas piloto fue el botón que permitía llamar a alguien con quien hablar cuando se sentían solos.
En ese momento, Li y su amigo se dieron cuenta de que lo que las personas mayores querían más que cualquier otra cosa era la certeza de una compañía.
"La inteligencia artificial no tiene ninguna habilidad o deseo de amar o ser amado, no importa cuan avanzada sea. Lo único que nos diferencia de la inteligencia artificial es la humanidad que está profundamente arraigada en nuestros corazones", afirmó Li al Diario del Pueblo.
Cuando la inteligencia artificial sea capaz de hacerlo todo, ¿qué significará el ser humano? “La respuesta está en la capacidad de amar”, considera Li, quien también es presidente y director general de Sinovation Ventures, una empresa de capital de riesgo que invierte en las empresas emergentes chinas que logren resultados.
El miedo a perder la conexión con lo humano sirve como preocupación para dimensionar y sintonizar el impacto de la inteligencia artificial en la sociedad.
“Incluso en la era de los teléfonos inteligentes, la especie humana es propensa a sentirse sola. La avalancha de productos de inteligencia artificial debe resaltar aquello que nos hace esencialmente humanos", concluyó Li.
(Web editor: Rosa Liu, Rocío Huang)