MOSCU, 22 nov (Xinhua) -- Los planes de Estados Unidos para retirarse de acuerdos para el control de armas como el Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (Tratado INF) son cortos de miras y peligrosos, dijo hoy el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov.
Rusia y Estados Unidos tienen el mayor potencial nuclear y por lo tanto tienen la responsabilidad especial de mantener la seguridad global, dijo Lavrov en una entrevista con la agencia noticiosa italiana AGI, de acuerdo con una transcripción del ministerio.
"No entendemos, y nos preocupa, el deseo de la dirigencia de Estados Unidos de cambiar el formato y de hecho eliminar el actual régimen internacional para limitar armamentos", dijo.
En octubre, el presidente de Estados Unidos Donald Trump dijo que Washington se retiraría del Tratado INF por la presunta violación de Rusia al acuerdo, cosa que Moscú ha negado en repetidas ocasiones, además de que advirtió sobre una nueva carrera armamentista nuclear.
Por otra parte, algunos políticos estadounidenses están cuestionando la necesidad de ampliar el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START) que expirará en 2021.
"Creemos que tales consideraciones son cortas de miras y peligrosas. El regreso a la filosofía de la preservación de la paz sobre la base del concepto de la destrucción mutuamente asegurada no se ajusta a las realidades del siglo XXI", dijo Lavrov.
Tras señalar que los dos países necesitan cooperar en amenazas y desafíos, incluyendo el terrorismo, la crisis regional y temas climáticos, Lavrov dijo que Moscú está listo para construir una asociación mutuamente beneficiosa con Washington.
"Esperamos que el sentido común prevalezca finalmente en Washington. Esto favorecería los intereses no sólo de los pueblos de Rusia y Estados Unidos, sino de toda la comunidad mundial", dijo.
El Tratado INF y el Tratado START son acuerdos para el desarme firmados en 1987 y 1991, respectivamente, por Estados Unidos y la entonces Unión Soviética. Después de la expiración del Tratado START original en 2009, el Nuevo Tratado START fue firmado por las dos partes en 2010.
Moscú y Washington se han estado acusando mutuamente de violar los acuerdos en años recientes, en medio de tensiones crecientes entre los dos países.