Inversión doméstica puede ser fuente principal de crecimiento económico, dice premier ruso

Actualizado a las 07/12/2018 - 08:41

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MOSCU, 6 dic (Xinhua) -- La economía nacional de Rusia puede ser impulsada principalmente por la inversión doméstica, declaró hoy el primer ministro ruso, Dmitry Medvedev.

"Una economía nacional puede desarrollarse principalmente a costa de la inversión doméstica que surge como resultado del desarrollo de la economía doméstica", dijo Medvedev en una entrevista con canales de televisión rusos.

"En términos generales, tenemos una economía fuerte, una economía de un país que se desarrolla rápidamente. Así que debemos priorizar nuestras propias fuentes de desarrollo", añadió.

De acuerdo con el primer ministro, el producto interno bruto (PIB) de Rusia creció 1,7 por ciento interanual de enero a octubre, lo que coincide con la revisión mensual más reciente del Ministerio de Desarrollo Económico ruso.

Se espera que la inflación en Rusia sea de alrededor de 3,5 por ciento para fines de este año, cerca del objetivo de 4 por ciento.

"Siempre necesitamos confiar en la fuerza de nuestra economía y en los procesos que continúan en la industria y agricultura", dijo Medvedev.

Rusia ha solucionado los problemas principales de seguridad alimentaria y está abasteciendo a los mercados mundiales con varios productos alimenticios, indicó.

Lo mismo se refiere al desarrollo de los sectores industriales, como las industrias de defensa y farmacéutica, donde la demanda fue estimulada junto con la inversión, agregó.

Por otro lado, Medvedev dijo que la inversión extranjera es una "fuente secundaria" para la economía nacional y que Rusia creará un mejor ambiente para atraer una mayor inversión de otros países.

"Evidentemente trataremos de preservar lo que hemos hecho en los últimos años, incluido el clima de inversión, y definitivamente lo mejoraremos", indicó.

Muchos países han continuado invirtiendo en Rusia, incluidos no sólo los países de Asia-Pacífico, como China y la India, sino también Estados Unidos y los países europeos, que no tienen las relaciones más cálidas con Moscú, dijo Medvedev.