MEXICO, 17 dic (Xinhua) -- El robo de combustibles en México "es un problema grave porque se roban entre 60.000 y 80.000 millones de pesos (entre unos 2.945 y 3.927 millones de dólares) al año", señaló hoy el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
El mandatario anunció en rueda de prensa que su gobierno presentará "el plan general" para enfrentar el problema del robo de combustibles a más tardar la siguiente semana.
"Ya se nombró a un coordinador, eso sí se los puedo adelantar. Y estamos trabajando de manera coordinada todas las dependencias del gobierno", indicó.
Sostuvo que dicho flagelo no sólo es responsabilidad del llamado "huachicoleo" (robo a través de tomas clandestinas), a cargo de organizaciones criminales y bandas, sino que también participan trabajadores de la empresa del Estado Petróleos Mexicanos (Pemex).
"Hay indicios de que el robo se da al interior de Pemex, de refinerías y de los centros de abasto de combustibles", agregó.
López Obrador dijo que independiente del plan que su gabinete de seguridad trabaja, "ya estamos atendiendo lo del robo de combustible".
El presidente busca convertir el robo de combustibles en delito grave, por lo que los infractores irán a la cárcel sin derecho a fianza.
El robo de combustibles de los ductos de Pemex se da principalmente en el estado central de Puebla, donde convergen ductos de la Refinería de Minatitlán, en el estado de Veracruz (este).
Ante esos hechos, Pemex ha presentado desde 2017 denuncias ante la fiscalía, mismas que han aumentaron de 3.267 en 2012 a 6.898 en 2017, según datos oficiales.